El presidente de Novagalicia Banco, José María Castellano, aseguró ayer que la situación de las dos cajas gallegas, Caixanova y Caixa Galicia, era "parecida". "Ninguna caja estaba bien ni nada que se le parezca", apuntó. "Cuando entramos tuvimos que hacer una reestructuración", e hizo referencia a que la ratio de solvencia (o core capital) de ambas era "similar", con un nivel del "5,67%". No hizo referencia en su comparecencia pública a las diferencias que había entre ambas instituciones de crédito, y se limitó a apuntar que los problemas actuales que afronta NCG se deben a una "situación heredada de las dos cajas".

Asimismo, Castellano volvió a reprobar las indemnizaciones concedidas a cuatro exdirectivos de la caja (y del banco, en el caso de Javier García de Paredes y Moro). "Serán legales pero no son morales y por eso nos hemos personado en la causa judicial", agregó el directivo. Todos los exgestores que percibieron un bonus a su salida de la entidad rechazaron devolver el dinero en actos de conciliación.