Las inspecciones fiscales presentan en la comunidad autónoma unos resultados muy dispares en función del servicio territorial en el que trabajan. Así, en la provincia de Pontevedra se registran los datos más elevados, tanto por el número de expedientes de sanción abiertos como por el importe de la deuda tributaria descubierta.

Entre los funcionarios de las áreas de Vigo y Pontevedra levantaron 371 actas por las que reclaman a particulares y empresas 10,6 millones de euros, una cantidad similar a la exigida mediante el procedimiento de apremio en las provincias de Ourense y Lugo juntas y que representa un tercio de la deuda tributaria de toda Galicia.

En A Coruña, el Ministerio de Hacienda contabilizó 299 expedientes sancionadores contra contribuyentes que no pagaron los correspondientes tributos. Por todo ellos, se espera una recaudación de 8,1 millones de euros. En Lugo los inspectores instruyeron 87 actas por las que reclaman 3,4 millones de euros y en Ourense, con 102 expedientes tramitados se requieren 8,6 millones. Sin embargo, cualitativamente, las inspecciones en la provincia de Ourense tiene mayor importancia, pues los impagos de los tributos representan nada menos que el 19% de la recaudación total de los impuestos cedidos.