La actual crisis económica se ha llevado por delante a 16 gobiernos por toda Europa y Alberto Núñez Feijóo no quiere que el suyo pase a engordar esa lista. Si hace tres años estaba en el momento ideal y en el sitio adecuado para iniciar la recuperación electoral y anímica del PP, ahora se encuentra con un escenario sombrío ante la dureza y duración de un desplome económico que cada semana amenaza con la llegada del apocalipsis. La mejor herramienta con que cuenta para combatir estos nubarrones son las buenas noticias y ha decidido buscarlas en el otro lado del Atlántico con un viaje previsto el próximo mes a varios países, probablemente Argentina, Uruguay, Brasil y Colombia según fuentes del PP, que algunos dentro del partido interpretan como señal de un posible adelanto electoral. Desde la propia sede de Génova confían en que los comicios tengan lugar en otoño, por lo que Feijóo podría convocarlos a finales de agosto o principios de septiembre.

En la sesión de control de esta semana, Feijóo anunció su intención de realizar "más viajes" al extranjero sin que ni él ni luego su equipo ofreciesen más detalles. Pero el precedente resulta significativo y apareció en su propio discurso: Pemex. De México, Feijóo volvió con un "principio de acuerdo" para construir siete buques en los anémicos astilleros gallegos y elaborar piezas para otros siete. Esa clase de noticias es la que tratará de traerse en la maleta el presidente de la Xunta.

Fuentes de la Xunta mantienen la consigna de los últimos meses: "solo el presidente sabe la fecha". Algún colaborador incluso bromea con el tema: "No me preguntarás creyendo que sé algo". Sin embargo, a su viaje se unen otras señales que hacen ganar terreno a la hipótesis del otoño, si bien un escenario tan imprevisible como el actual puede dar el vuelco a la situación en cualquier momento. Incluso a toda la Unión Europea.

Los contactos de Feijóo con empresarios se alternarán con encuentros con la colectividad gallega. En Argentina viven unos 140.000 gallegos con derecho a voto que pueden ser clave en los resultados electorales y su movilización resulta crucial, pues en estos comicios se aplicará la ley que impone el voto rogado. Cada persona deberá expresamente solicitar su papeleta. Y la mayoría absoluta actual del PP depende de un solo escaño. PP y PSdeG cambiaron esta misma semana su posición y pidieron suprimir este requisito ante la baja participación de la colectividad en el extranjero.

Precampaña en Argentina

Feijóo no estará solo en este viaje. También el secretario ejecutivo el PP en el exterior, Alfredo Prada, viajará, según Europa Press, la próxima semana a Argentina para preparar las elecciones gallegas y vascas, que hace cuatro años coincidieron y que como muy tarde se celebrarán en marzo.

La sede central del PP en la calle Génova mantiene su mirada en Galicia en términos electorales, pues puede medir el grado de desgaste de sus siglas apenas medio año después de llegar a Moncloa por las dificultades para encontrar una salida a la crisis y los recortes no solo que se han impuesto, sino que Mariano Rajoy ya ha anunciado que aprobará. Anticiparse al desgaste de esas recetas de austeridad y a unos presupuestos que se prevén los más duros de la historia de la democracia con una buena noticia traída de las Américas no hacen sino alimentar las señales de un adelanto. También contribuye a ello el acelerón de actividad de los últimos días, pulsando el botón verde de la comisión de investigación sobre las cajas y su transformación en fundación de carácter especial, además del anuncio de Pemex, aún no concretado.

El adelanto, además, cogería con el pie cambiado al PSdeG, que prevé celebrar sus primarias para elegir candidato en septiembre y vive una crisis pública con el enfrentamiento entre la dirección y Vigo por el caso Carmela Silva. En ese escenario, a Feijóo le faltan buenas noticias. Quizás las encuentre en América.