El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha llamado a los tres aeropuertos gallegos a coordinar su oferta de vuelos para evitar una competencia entre ellos que sólo beneficia a Oporto y ha atacado las inversiones "sin planificación" en estas infraestructuras desarrolladas por el Gobierno del PSOE.

"Lo que sorprende es que se hayan ampliado todos a la vez, que se hayan hecho terminales todas a la vez, y esté todo sin pagar. Y que haya gente que ha hecho su carrera política a costa de la deuda pública", ha censurado Feijóo en los Desayunos Informativos de Europa Press, en velada alusión al exministro de Fomento José Blanco, aunque sin pronunciar su nombre.

Ha argumentado que "falla" la cuenta de resultados de las terminales gallegas porque a cada una se le imputan los gastos en sus infraestructuras. Al respecto, ha ironizado con sugerir que se apaguen por la noche las luces del aparcamiento de Lavacolla porque si no se ve que es "un párking fantasma".

En su opinión, lo que es necesario es "una coordinación aeroportuaria y que los aeropuertos gallegos no puedan competir entre sí", de forma que se produzca "una complementariedad", pero ha rechazado que haya que cerrar alguno de los tres.

Así, ofreció la colaboración de la Xunta al Ministerio de Fomento en este objetivo para conseguir que los gallegos dispongan de vuelos "con independencia de que a lo mejor haya que moverse a 50 kilómetros de casa para buscar un vuelo internacional o uno a otras partes del territorio que no sean Madrid o Barcelona".

FUSION DE AYUNTAMIENTOS

Acerca de los recelos que provoca el impulso a la fusión de ayuntamientos, el dirigente 'popular' ha dicho que en las "grandes familias" como el PP "unos están a favor y otros lo ven con escepticismo", pero ha apostado por reflexionar sobre la actualización del mapa municipal.

En todo caso, ha indicado que "ya nadie discute" medidas que se han impulsado como fórmula para fomentar la cooperación real entre ayuntamientos en la prestación de servicios públicos. Además, defendió que el PP es "un partido reformista", mientras que contrapuso que "otros se vuelven conservadores a la hora de la verdad" al no apoyar fusiones como la de Oza y Cesuras.