El pastel de las obras públicas se lo quedan contadas empresas. De los 475 millones de euros adjudicados el año pasado por la Xunta, diez firmas se hicieron con contratos por importe de 325 millones. O lo que es lo mismo, diez empresas se quedaron con el 70% de las inversiones del Ejecutivo de Feijóo en 2011, según datos de la Federación Gallega de la Construcción.

Este reparto de la tarta de contrataciones no es exclusivo de la Administración autonómica. En las adjudicaciones de obras del Estado, también ocurre algo similar, aunque en porcentajes no tan elevados: una decena de empresas copan el 56,6% de las obras sacadas a concurso el año pasado por parte del Gobierno central –de los 786 millones adjudicados a un total de 128 compañías, un total de 421,5 millones fueron para proyectos de diez empresas–.

Ante la "excesiva concentración" de la adjudicación de obras en la comunidad, la Federación Gallega de la Construcción urge a la Xunta que dé entrada a otras empresas más pequeñas. "Son obras por concurso que se adjudican según la oferta económica y los medios materiales y humanos. Encabezan el listado las de siempre", cuestionan desde el sector de la construcción y por eso reclaman al Gobierno gallego que "haga un esfuerzo en esta época de crisis con otras empresas no tan grandes, ya que tiene margen para hacerlo", al tiempo que destacan el "significativo" descenso en el número de empresas de obras adjudicatarias: 597 el año pasado frente a las 984 del año anterior, un 40% menos.

Desde la Consellería de Medio Ambiente, Infraestruturas e Territorio se remitieron a la ley de contratación de obra pública para justificar la adjudicación de los proyectos. "La ley es muy clara y precisa en el modo de proceder a la licitación y posterior adjudicación", argumentaron.

Copasa y Dragados

La lista de las adjudicaciones de la Xunta el año pasado –a un total de 253 empresas– la encabezan Copasa, con cinco obras y el 19,1% de las inversiones totales, seguida de CRC, con siete proyectos (12,6%); Covsa con nueve obras (10,8%), Taboada y Ramos con otras siete (9,6%), Probisa con dos (3,2%), Sercoysa con siete (2%) y Condesmo con tres (3%).

En el caso de la Administración del Estado, fueron 128 las empresas beneficiarias. A la cabeza de adjudicaciones están Dragados con tres obras por importe de 88,8 millones (11,2% del total), Comsa con nueve proyectos (6,4%), Copasa con 12 (5,26%), Corsan-Corviam con dos (4,8%) y Sacyr con tres (4,5%). Y si se tienen en cuenta las adjudicaciones de ambas administraciones, Copasa encabeza el listado de las más beneficiadas por las inversiones públicas con un total de 17 obras por importe de 139,2 millones, seguida de Dragados (seis obras por 89,7 millones), CRC (60,2 millones), Comsa (57,8), Covsa (57,2), Taboada y Ramos (57,2), Acciona (48,5), Obrascon Huarte Laín (43,9), Corsan Corviam (41,3) y Sacyr (36 millones).

En el balance del ejercicio pasado, además de la "excesiva concentración" de la adjudicación de obras en la comunidad, la Federación Gallega de la Construcción advierte del desplome de la inversión pública. Según los datos del sector, la adjudicación en Galicia el año pasado se quedó en 1.539 millones, un 27,19% menos que los 2.114 millones de 2010.