Los incendiarios y la sequía. Contra ellos cargó ayer la Xunta todas las responsabilidades del alcalde del fuego que redujo a cenizas el corazón de las Fragas del Eume, un paraje natural de más de 9.000 hectáreas. Ante las críticas de oposición y ecologistas apuntando a la falta de medios y de políticas de prevención, el Ejecutivo gallego defendió ayer su gestión durante esta catástrofe natural que calcinó más de 750 hectáreas en la zona del Eume, 370 de ellas de "alto valor ecológico", según la Consellería de Medio Rural. Aunque el fuego todavía no está extinguido, el descenso de las temperaturas y el incremento de la humedad ante la previsión de precipitaciones para hoy ayudara a sofocar los rescoldos definitivamente.

Un día después de que la Xunta desactivase el nivel de alerta 1 por la proximidad de las llamas a las viviendas y dar por controlado el incendio, los trabajos de las brigadas forestales y los más de 300 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) se centraron en enfriar los puntos más calientes del fuego, refrescando el suelo, así como en labores de vigilancia con el apoyo de medios aéreos.

Y en el campo de la batalla política, Xunta y oposición escenificaron sus diferencias sobre un asunto que ha sido siempre un arma arromadiza entre grupos políticos. Para PSdeG y Bloque, el Gobierno de Feijóo puso de manifiesto su "incompetencia" tras el fuego declarado en A Capela y advirtieron de que con esa forma de actuar "no habrá consenso" en materia de lucha contraincendios.

En su intervención en la comisión de Agricultura del Parlamento, el secretario xeral de Montos, Tomás Fernández Couto, defendió que el dispositivo desplegado por la Xunta actuó "con rapidez y una alta eficacia" y cargó todas las responsabilidades sobre el autor o autores y la "adversa climatología". "Fue un fuego muy complicado con viento del nordés que fue capaz de saltar las fragas, el cañón del río Eume y pasar al otro lado. Así es imposible actuar. Solo pudimos controlar los flancos y la cola para evitar que se expandiera", argumentó Couto.

Descoordinación

Por su parte, la socialista Sonia Verdes reprobó un operativo "insuficiente, descoordinado y paralizado" y afeó el comportamiento del presidente de la Xunta, al que –dijo– "cada vez es más evidente que esto le queda grande". Mientras, la diputada nacionalista Tereixa Paz advirtió de que el incendio de las Fragas do Eume es la "crónica de un fracaso anunciado" y coincidió en censurar que el dispositivo está "absolutamente mermado", con cuadrillas de dos o tres miembros en lugar de siete porque la Consellería de Medio Rural, según denunció, "no hace reposición de efectivos".

Precisamente la responsable de este departamento autonómico, Rosa Quintana, comparecerá la próxima semana en el pleno del Parlamento para explicar la actuación de la Xunta en el incendio en el parque natural eumés.