El AVE gallego continúa recibiendo ataques. Después de la campaña mediática y empresarial desde Madrid dudando de su rentabilidad y denunciada por Fomento, las críticas del PP extremeño y el ataque de CiU a inversiones que "no llevan a ningún lado", ayer fue el turno de Esquerra Republicana de Cataluña. Su portavoz en el Congreso, Joan Ridao, tiró de ironía para arremeter contra la alta velocidad y cuestionar que se realice esta inversión en lugar de desdoblar una carretera nacional en Girona. En su opinión, es más justo ofrecer una alternativa de dos carriles a una autopista de esa localidad catalana que conectar Galicia, Castilla-León y Madrid por alta velocidad.

"Al mismo tiempo que el ministro de Fomento, José Blanco, decía que no había dinero para la N-II aunque es una prioridad, cosa que hace reír, el Gobierno español licitaba 7.500 millones de euros para adjudicar el tramo del AVE entre Olmedo y Ourense, que, como todo el mundo sabe, es un trazado no sólo competitivo, sino eficiente y muy transitado y es una auténtica prioridad", ironizó Ridao en un acto en Girona.

El secretario general de ERC no se quedó ahí y aseguró que Moncloa "tiene dinero para lo que quiere" mientras "maltrata a Girona" por no ampliar la carretera nacional de esta localidad inversión paralizada por Fomento debido a sus recortes presupuestarios. "Es una vía muy transitada que nos conecta con Europa", añadió.

El ataque del diputado de ERC se produce cuando el Ministerio de Fomento debe licitar los 6.000 millones del tramo entre Olmedo y Ourense, el mayor concurso en la historia de España y que ensaya una nueva fórmula inédita dando entrada al capital privado. El último plazo puesto por Fomento es abril. Fuentes socialistas vinculan las palabras de Ridao y la cercanía de la licitación y las consideran un intento por frenar la decisión de Fomento. Además, consideran que el PP "se encuentra detrás de toda esta campaña" contra el AVE gallego, que irá "in crescendo" a medida que se acerquen las elecciones municipales.

La tercera tormenta política alrededor de la infraestructura, tras las críticas del PP extremeño y CiU, generó críticas de Xunta y partidos gallegos, aunque con distinto grado de intensidad. Además, se procuce unas semanas después de que Cataluña celebrase el tercer aniversario del AVE con Madrid.

La Xunta reclamó a Fomento que desoiga las críticas y le urgió a licitar el proyecto, una posición que lamentaron desde el PSOE. "Se echa en falta mayor dureza para defender un proyecto de país", indican.

El malestar provocó incluso un enfrentamiento con el BNG, con el que los independentistas mantienen una relación cordial. El portavoz del Bloque en el Congreso de los Diputados, Francisco Jorquera, lamentó su "profundo desconocimiento" y anunció que abordaría el tema con Ridao en la sesión de la próxima semana.

Además, el Bloque presentará una iniciativa en las Cortes para obligar a todos los partidos a posicionarse respecto a este proyecto. Hace dos semanas, el Congreso ya rebajó una proposición de CiU para reprogramar el AVE gallego, que hubiese puesto en peligro la inminente macrolicitación y el plazo de finales de 2015 como fecha de entrada en servicio.