El vigués Telmo Varela Fernández, un exgrapo histórico y actual secretario comarcal de la Central Unitaria de Traballadores (CUT), fue detenido ayer en su vivienda de Coruxo en Vigo en una operación desarrollada por la Guardia Civil para esclarecer los violentos atentados de radicales independentistas en la provincia de Pontevedra durante el último año. En la misma operación fue detenido su compañero del sindicato, José P.L., vecino de Canido.

La operación, coordinada por el Juzgado de Instrucción 5 de Vigo, se encuentra bajo secreto de sumario por lo que apenas han trascendido datos sobre la misma. Efectivos de la Guardia Civil llegaron a media mañana al domicilio de Telmo Varela y, en su presencia, realizaron un registro domiciliario según confirmaron ayer responsables de la CUT de Vigo. El mismo operativo se repitió después en Canido, en la casa del otro detenido. Algunos vecinos observaron la ida y venida de los agentes y fueron testigos de la retirada de varias cajas con documentación.

La Guardia Civil halló en el domicilio de Varela Fernández sustancias que lo vincularían a los hechos investigados: los asaltos con cócteles molotov y artefactos incendiarios a sedes sindicales, políticas y oficinas de empleo en la provincia de Pontevedra durante el último año. Los agentes intervinieron en la vivienda varias botellas con gasolina y otros elementos utilizados habitualmente para fabricar cócteles molotov.

Los dos sindicalistas de la CUT arrestados fueron trasladados escoltados a los calabozos del cuartel de la Benemérita en Pontevedra y en las próximas horas serán puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo. La operación seguía anoche abierta y no se descartan nuevas detenciones.

En principio no ha trascendido si los sindicalistas están vinculados al grupo radical Resistencia Galega, si bien se les vincularía con la mayoría de los atentados perpetrados con cócteles molotov durante el último año y medio en la provincia de Pontevedra, especialmente a sedes sindicales y de partidos políticos, que fueron reivindicados por Resistencia Galega.

De hecho, una llamada telefónica a FARO DE VIGO en nombre de la organización independentista reivindicó el pasado 10 de abril los ataques a las sedes sindicales de UGT y CCOO en Vigo y Porriño, así como al chalé de un concejal socialista vigués en Coruxo. El comunicante, un varón, se limitó a señalar que estas acciones fueron realizadas por la "traición" de las centrales sindicales a la clase trabajadora.

Apenas una semana después un hombre, en nombre de Resistencia Galega, se atribuía también los ataques con artefactos incendiarios contra las sedes del PP en Gondomar y Nigrán. El comunicante adelantaba que repetirían este tipo de acciones contra un partido que, en su opinión, se ha posicionado "contra Galicia y su lengua". También el PSOE ha sufrido ataques incendiarios que derivaron en importantes daños materiales en distintas sedes de la provincia de Pontevedra, caso de Salceda de Caselas y Salvaterra.

Los expertos en explosivos de la Guardia Civil determinaron que los cócteles molotov utilizados en varios de estos ataques eran similares, al igual que el modo de actuación de los incendiarios. Los restos de algunos de los artefactos se comprobarán ahora con elementos intervenidos en los registros de las viviendas de los dos sindicalistas de la CUT.

Los responsables de la Central Unitaria de Traballadores hicieron público ayer un comunicado en el que indican que ambos detenidos son trabajadores del sector naval en Vigo y, pertenecen al sindicato. Aseguran desconocer la razón por la que fueron detenidos, pero tienen claro que se trata "de una redada represiva más contra los trabajadores, destinada a coartar la lucha sindical", a la vez que resaltan que Telmo Varela y José María P.L. destacan "por su entrega en la defensa de los derechos de los trabajadores".

En cuanto a Varela Fernández consideran que vincularlo con su pasado en el Grapo,"no tiene nada que ver con su realidad actual. Ahora carece de militancia política organizada", aseguran.