"La experiencia soviética convirtió a Romero en un radical de derechas"

Escritor y articulista, el ourensano Manuel Rego Nieto, conoció personalmente a José Romero Carreira. De hecho, vio cómo bajaba del tren que lo traía a Galicia desde su desembarco del "Semíramis" y entabló contacto con él gracias a que la novia de Manuel de entonces era del mismo pueblo, Solveira.

–¿Cómo influyó en Romero su internamiento en la URSS?

–La experiencia soviética le hizo venir muy desengañado del comunismo. Como yo era, y soy, secretario general del Partido Carlista, que se caracteriza por el socialismo autogestionario y el federalismo, chocábamos y teníamos unas discusiones tremendas porque con la democracia evolucionó hacia una derecha anticomunista y antisocialista. Se hizo un hombre muy radical de derechas. Aunque antes de irse a la URSS era muy de izquierdas, acabó defendiendo de modo muy vehemente a la derecha. Todos sus sufrimientos en los campos de internamiento de la URSS le hicieron estar contra todo lo que significaba la izquierda porque sufrió mucho en el campo de concentración.

–José Romero le contaría cosas terribles de su estancia en el campo de concentración...

–Son tantas anécdotas que podría dar una conferencia. Cuando lo llevaron con los de la División Azul a Siberia al campo de concentración, el viaje en tren fue tan terrible que hubo hechos de canibalismo.

–¿No sacó nada bueno de aquella experiencia?

–Bueno, él allí pudo aprender varios idiomas. Como había prisioneros de distintos lugares, aprovechó el tiempo. Al volver a España eso le valió para trabajar un tiempo como intéprete en una agencia de viajes.

–¿Cómo era su carácter?

–Era buena persona, pero vino desequilibrado de los nervios.