Antes de conocerse el nuevo capítulo en la negociación,el presidente de la Xunta,Alberto Núñez Feijóo,volvió a hablar de la situación en la que está la ley y se mostró"dispuesto"a someterla al Tribunal Constitucional, pero no a"los intereses de algunos cargos andaluces"del Gobierno central, en alusión al secretario de Estado de Cooperación Territorial. El presidente gallego ratifica su apuesta por el"diálogo"y por volver a sentarse"en la mesa de negociaciones"de la, incidió,"se levantó" la delegación estatal y no la gallega.""No pierdo la esperanza", aseguraba ante la espera por la contestación de Gaspar Zarrías. A la oferta de seguir avanzando para lograr un pacto que permita que Moncloa retire el recurso de inconstitucionalidad contra once de los preceptos incorporados a la normativa, Núñez Feijóo acompaña sus reticencias porque el Ejecutivo central"cuestiona" ahora los plazos que marca la ley gallega para renovar los órganos de gobierno de las dos cajas de la comunidad."Es una falta de respeto y un planteamiento" irresponsable y excesivamente chusco",asegura."Lo que deberíamos discutir es si las competencias –añade– son homologables a las leyes de Andalucía, Euskadi o Cataluña,y yo digo que sí". Feijóo asegura que sólo busca "acertar"desde el"consenso".La fusión de Caixanova y Caixa Galicia, es para el presidente,"la opción menos mala", puesto que permitir la unión de las entidades de ahorro gallegas con otras foráneas sería"muy arriesgado".