Ríos desbordados y calles anegadas de agua, mientras el viento arrastraba contenedores y vallas publicitarias. Es la radiografía de Galicia, golpeada de lleno por el temporal de viento y lluvia durante la madrugada del sábado al domingo. Las intensas tormentas provocaron inundaciones en 48 municipios gallegos, siendo la provincia de Pontevedra la más afectada. Además, Unión Fenosa se vio obligada a abrir las compuertas del embalse Barrié de la Maza, en las proximidades de Santiago de Compostela, que se encuentra al límite de su capacidad, según informó la Xunta.

Durante la noche del sábado y la mañana de ayer, el Centro de Atención a las Emergencias 112 de Galicia recibió más de 200 llamadas hasta las seis de la tarde por incidencias relacionadas con el temporal que afecta a la comunidad, donde para hoy ya se prevén lluvias débiles.

Como consecuencia de las fuertes lluvias se registraron inundaciones en 22 municipios de Pontevedra, nueve de Lugo, cinco de Ourense y 12 de A Coruña, provincia en la que se produjeron desbordamientos de ríos de los ayuntamientos de Teo, O Pino y Val do Dubra y la apertura de las compuertas del citado embalse de Unión Fenosa en el río Tambre.

En la provincia de Lugo se desbordaron ríos en Vilalba, Abadín y Begonte y en Ourense, los principales problemas se registraron en Ribadavia, mientras que Pontevedra, la circunscripción más afectada, las poblaciones con mayores incidencias fueron Vilagarcía, Cuntis, Ponteareas, Lalín y Ribadumia.

La provincia de Pontevedra fue la más afectada. Así, en la localidad de Caldas de Reis se desbordó el río Follente que inundó la carretera N-640 a la altura del punto kilométrico 225 yy hubo que evacuar diveros pubs de la "movida". Asimismo, los bomberos de Ponteareas, rescataron a una persona que cayó con su vehículo al agua debido al desbordamiento del Río Tea, en la zona conocida como A Freixa. El río desbordó el puente romano y algunas personas quedaron atrapadas en sus viviendas.

Las inundaciones se sucedieron en Vilagarcía, O Grove, cambados y Vilanova, especialmente en los puntos donde se acometen obras de infraestructuras como polígonos industriales, trazado del AVE y nuevos viales. Varios animales se ahogaron en un gallinero de Vilanova y en Cambados hubo que desalojar durante la noche una casa de turismo rural.

En la capital pontevedresa, los bomberos acudieron la calle Antonio Taboada, en el parque de Campolongo, para cortar un árbol que se hallaba en mal estado y amenazaba con caerse. Además, se produjo un incendio de un galpón en A Barcia.

En Vigo los bomberos apenas tuvieron llamadas de emergencia y apenas se produjeron inundaciones. De madrugada varios contenedores se desplazaron por la fuerza del viento e impactaron contra algunos coches. El suceso más grave tuvo lugar en la calle Lepanto, ya que el vehículo afectado iba circulando, afortunadamente no hubo heridos aunque sí importantes daños en el vehículo, cuyos ocupantes se llevaron un gran susto. Otro caso similar sucedió en José Gil. En la carreta de las Plantas se cayó un árbol y el viento arrancó un toldo en Vía Norte.