El Parlamento gallego, con los votos a favor de PSdeG y BNG y la abstención del PPdeG, reclamó ayer a la Xunta el impulso de un plan de ayudas "excepcionales" de 4 céntimos de euro por kilo de cuota de cada explotación láctea, tres más de los que se pagan actualmente. Esta iniciativa se debe a la necesidad de paliar la crisis de precios y de garantizar una cuantía de 7.500 euros por granja, la máxima permitida por la normativa europea.
La portavoz parlamentaria del PPdeG, Isabel García Pacín, solicitó la "colaboración" de los socialistas gallegos a la hora de demandar ayudas al sector lácteo ante el Gobierno Central, y criticó que PSdeG y BNG pretendan que se efectúe un "reparto" de 7.500 euros por explotación "sin criterios racionales".
Por su parte, la diputada socialista Sonia Verdes cargó contra el "desmantelamiento" por el Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo de los "logros conseguidos" por el gobierno bipartito. Verdes destacó la apuesta del Ministerio de Medio Rural por el acuerdo del sector lácteo firmado en julio y por la reunión que el Ministerio mantuvo ayer con la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil) para avanzar en la implantación de contratos homologados.
Con Verdes coincidió la portavoz de Medio Rural del BNG, Tareixa Paz, al exigir que la partida orientada a financiar las ayudas directas se incremente desde los 20 a los 50 millones de euros.
Por otra parte, los tres grupos con representación en la Cámara Gallega pidieron a la Xunta que impulse la implantación de contratos homologados para regular la compraventa de leche de vaca. Además, el BNG, mediante una proposición no de ley, aprobada por unanimidad, instó a la Xunta a que condicione la concesión de ayudas a las empresas lecheras a la suscripción previa de contratos homologados.
