El ministro de Fomento, el lucense José Blanco, explicó ayer en Pontevedra las razones políticas que le llevaron a ordenar la revisión del trazado de algo más de 60 kilómetros del AVE Ourense-Lubián, la salida de Galicia hacia la Meseta. A los argumentos técnicos, como que el proyecto diseñado sólo era para velocidades de 200 kilómetros por hora o que obligaría a interrumpir el tráfico por la vía actual, el ministro añadió que no podía permitir un tren de baja calidad para Galicia, teniendo en cuenta que su periodo de explotación es de 100 años.

“La infraestructura del tren de alta velocidad va a servir a varias generaciones, por lo tanto, lo que hagamos ahora, no tendrá marcha atrás. Como ministro y como gallego no podía permitir que Galicia estuviese condenada durante un siglo a perder el tren del futuro y admitir un AVE de menor calidad que el de otros puntos de España. Con esta decisión, pueden estar seguros de que Galicia, ahora sí, no perderá el tren del futuro”, aseguró José Blanco tras la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Pontevedra para reformar varias carreteras en la comarca.

Los cambios, que afectarán al trayecto desde Porto, en el ayuntamiento de Vilar de Barrio, hasta Lubián, en la frontera con Zamora, implicarán una trazada de nuevo diseño con curvas de mayor radio, túneles más largos y la separación por completo de la actual vía, que podrá seguir usándose de forma independiente para el transporte de mercancías. Eso supondrá que el AVE podrá alcanzar velocidades superiores a los 300 kilómetros por hora, cuando en el proyecto inicial eran de 200 km/h, y que los tiempos de viaje entre Madrid y Galicia se acorten, pero también que los plazos sufran otra demora, ya que deben hacerse nuevos planes constructivos y superar la tramitación ambiental.

La previsión del Ministerio de Fomento es que la adjudicación de estos cuatro tramos afectados, desde Porto hasta Lubián, se pueda realizar a principios del próximo año.

“Mi objetivo es que Galicia tenga el mejor AVE. Por eso quiero ratificar la decisión que he tomado de cambiar el trazado para que la alta velocidad llegue a Galicia en las mismas condiciones que llega a Sevilla o a Barcelona”, comentó el ministro, quien expondrá con todo detalle las modificaciones en la reunión, todavía sin fecha, que mantendrá con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Las explicaciones también las dará en el Congreso de los Diputados, puesto que José Blanco ha registrado una solicitud de comparecencia para concretar, con carácter monográfico, las variaciones que va a introducir en la conexión del AVE entre Galicia y Madrid sobre el proyecto aprobado en 2003, cuando el ministro era el popular Álvarez Cascos.

Feijóo interpreta que “como no hay dinero se buscan explicaciones para aplazar la obra”

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, confió ayer en que el ministro de Fomento, José Blanco, se dé cuenta de que “a Galicia no se le puede seguir faltando al respeto” con los retrasos de la llegada del AVE, que estimó en 2015 tras los nuevos cambios que incrementarán su coste.

En una entrevista a la Cadena Ser en Vigo, Feijóo se preguntó “por qué ahora se hace un cambio que conlleva un incremento de coste y de los plazos de ejecución” y alegó que en Galicia se especula que como “ahora no hay dinero lo que se ha de buscar es una justificación para aplazar una obra inaplazable”.

Desde 2003, Fomento “sabía que si se hacen más túneles en línea recta se llega antes”, apuntó. “Espero con todo el interés del mundo que en la reunión que vamos a tener el ministro de Fomento y yo mismo, el ministro se dé cuenta de que a Galicia no se le puede seguir faltando al respeto de forma continuada y constante”, insistió.

Apoyó su argumento en que la comunidad gallega es una de las más periféricas de España, con unas condiciones climatológicas que dificultan en algunos casos el transporte aéreo y con la necesidad de incrementar su renta media pues, de lo contrario, “seguiremos alejándonos de la media de renta de España”, auguró.