La administración no es una empresa, afirma el nuevo conselleiro de Economía e Industria, quien apunta a continuación que “hay mecanismos de gestión compatibles”. Javier Guerra reitera dos ideas: medidas de choque y líneas de financiación a corto plazo; y apoyo a la innovación para ganar competitividad a medio. Acaba de aterrizar, y es visible su preocupación por la responsabilidad. Empresario textil, suele vestir con ropa informal. Ahora llevará traje a menudo, pero admite que se siente más cómodo sin corbata. Se mantendrá como dueño de sus firmas, aunque se desvincula de la administración. “Pierdo cualquier capacidad ejecutiva, y cumplo la ley de incompatibilidades”, expone.

-Un momento difícil. ¿Le costó decir que sí?

-No. El presidente tiene una idea muy clara: ayudar a la economía real de Galicia, y yo quiero contribuir como gallego. La economía y la industria son vitales, por eso se agrupan en una consellería. Tenemos que estar próximos a todos los sectores, porque las palpitaciones son débiles, y ésta es la forma.

-¿Lo peor está por llegar?

-Hablar del futuro es difícil, pero si no se coge el toro por los cuernos las cosas se complicarán más. Lo haremos. Los gallegos somos una sociedad trabajadora que se buscó la vida fuera, y lo hacemos también aquí. Y hay sectores muy competitivos. Automoción, naval, textil...

-¿Cuáles son sus medidas inmediatas?

- Presentaremos un plan de choque en cien días. Tenemos que dar las condiciones a las empresas para que se desarrollen. Incluir el Igape en Industria es un indicativo. Son medios financieros. La meta es crear empleo, pero también ganar competitividad. Y nos apretaremos el cinturón en gastos de la administración. Es muy importante.

-La principal queja de las empresas son las dificultades para obtener financiación. ¿Habrá más ayudas y líneas de crédito?

-Es clave dar financiación y nos volcaremos, generando más capacidad y menos costes. Y nos sentaremos con las entidades financieras, cajas y bancos, apoyando también que el flujo llegue a Pymes y autónomos, algo fundamental en Galicia.

-¿Apoya las ayudas a la formación en empresas con EREs para evitar rebajas de plantilla?

-Mi objetivo es que mantengan su actividad y a los trabajadores, no tanto que se los recoloque. Es mi principal empeño.

-¿Ve riesgo en Citroën?

-Debo conocer bien la situación. Citroën es una prioridad, y gestionamos una reunión del presidente de la Xunta con el del grupo. Ayudaremos en lo que podamos a todo el sector. Pero tengo claro que la política del Gobierno central es errónea. Es necesaria una ayuda directa a la compra del automóvil. Funciona en todos los países.

-¿Aplicará entonces el paquete de ayudas prometido?

-Con seguridad. Estudiaré el encaje, pero aplicaremos la ayuda de 1.000 euros a la compra, y trabajaremos en las rebajas fiscales. Apoyaremos al sector productivo y a los concesionarios.

-¿Comprará un Citroën?

-Compré un coche hace poco, pero usaré el C5 de la consellería, y estoy encantado.

“El naval necesita facilidades de financiación y el Igape es clave; será una de mis primeras reuniones” -El naval empieza a resentirse también y firma menos contratos. ¿Qué medidas plantea?

-Necesita financiación y el Igape es fundamental. Los sistemas de venta de barcos tienen unos avales complicados. Me he comprometido con el sector y será una de mis primeras reuniones. Me entrevisté hace poco como diputado con responsables del Clúster del Naval y me pidieron que transmitiese que querían reunirse con el nuevo conselleiro. Bueno, pues está hecho. Su situación e menos crítica a corto plazo, pero los ciclos son largos. Es una prioridad, sobre todo en Vigo. Conozco la situación en toda Galicia, y trabajaremos donde sea necesario. Pero claro, soy vigués.

-El suelo industrial es una demanda histórica. ¿Ahora es prioritaria?

-Hay zonas en que sí. Yo intentaré que las empresas tengan un entorno de competitividad mejor. Donde eso contribuya a que sea así, lo impulsaremos.

-¿Impulsará la cooperación con el norte de Portugal, o es un competidor?

-Hay competitividad, pero la buena relación es imprescindible por el mercado. El textil, por ejemplo. Y también por el consumo, que se amplía.

-Usted es empresario. ¿Asume el cargo con un modelo de gestión privada?

- Aprendí en el Ayuntamiento de Vigo que la administración no es una empresa, y las prioridades son diferentes. Pero existen mecanismos que pueden ser aplicados. Lo que pretendemos es eficacia. Por cada euro de los gallegos, sacar el máximo producto posible. No son incompatibles.

-¿Se ha desvinculado de sus empresas por el cargo que asume?

-Me desvinculo de su administración y cumplo la ley de incompatibilidades. Yo sigo siendo propietario, pero no tengo administración sobre ellas. Tengo las acciones de la compañía, pero ningún tipo de capacidad ejecutiva.