Entre el público de la plaza del Obradoiro había muchos empresarios, pero dos buscaron de manera especial al nuevo presidente de la Xunta. Se trataba de Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, y de Juan Luis Arregui, vicepresidente de la compañía eléctrica y presidente de Ence. El objetivo no era otro que hablar del traslado de la fábrica de celulosa de papel que Ence tiene en la ría de Pontevedra, un compromiso asumido por Feijóo para esta legislatura.

Primero hablaron con Alfonso Rueda, el futuro conselleiro de Presidencia, luego con Mariano Rajoy -en una conversación que no pasó del minuto- y finalmente con el presidente de la Xunta, al que tan sólo le trasladaron una petición, según fuentes del PPdeG, que era la de concertar cuanto antes una reunión para conversar “con calma” sobre el traslado de la papelera.

Tal como anunció en su discurso de investidura, el propósito de Feijóo es intentar a lo largo de esta legislatura el cambio de ubicación de la fábrica que Ence tiene en la ría de Pontevedra a otro lugar, siempre dentro de la comarca pontevedresa. El bipartito también lo intentó, pero la empresa papeletra mantuvo que no se movería de su actual localización hasta que venciera la concesión, en el año 2018.

Se da la circunstancia también de que Iberdrola fue una de las grandes perdedoras del concurso eólico resuelto por la anterior Xunta, que el nuevo presidente se comprometió a revisar.