El bipartito dejará las arcas autonómicas al futuro ejecutivo de Núñez Feijóo con 351 millones de euros, lo que supone “un 29% más” de recursos con respecto a los entregados por el Gobierno de Fraga a 31 de julio de 2005, cuando la tesorería contaba de la Xunta contaba con 271,6 millones. Tras concluir el Consello, el presidente en funciones, Emilio Pérez Touriño, dio a conocer el informe del control presupuestario antes de iniciar el traspaso de poderes, que revela también que la ejecución real de las inversiones alcanza el 6% mientras que su gasto comprometido llega al 48%. “Este documento acredita un menor nivel de gasto que en el periodo anterior, un menor compromiso de gasto para el futuro y una mayor liquidez. La situación contable está razonablemente saneada”, destacó.

Con respecto a la marcha de las cuentas autonómicas de este año, Touriño aseguró que el 51% de los Presupuestos está comprometido y que el ya ejecutado alcanza el 17%, lo que representa un punto más que el pasado ejercicio a estas alturas, que en el caso de las inversiones el incremento oscila entre el 2% y el 4%.

Con estos números, explicó, se “rompe el tópico” de que en año electoral el nivel de compromiso y de ejecución del presupuesto es mayor, ya que “prácticamente es equivalente” al pasado ejercicio. De esta forma, también daba réplica al PP, que acusa al bipartito de dejar sin margen de maniobra al nuevo Ejecutivo.

¿Y cuáles son los pagos a los que la Xunta de Feijóo tendrá que hacer frente en el futuro? La “huella” -en palabras de Touriño- que heredará el Partido Popular será del 10% de los Presupuestos del próximo año, cuando en 2006, tras el cambio en la Xunta de Fraga, fue del 14%.

Para 2011, la cifra comprometida alcanza el 3%; en 2012, el 2% y en 2013, otro 2%. En números absolutos, supone ya un gasto fijado de 343,3 millones, 216,7 millones y 199,2 millones de euros, respectivamente. En total, 759 millones.

En cuanto a las inversiones futuras, el compromiso está en el 20%, que llega al 43% el caso de la Consellería de Política Territorial, el organismo más inversor de la Xunta.

Comparativamente con el gobierno anterior, quiso precisar Touriño, Fraga dejó unas inversiones ya establecidas del 31%, que en el departamento de Política Territorial fue del 45%, un nivel “parecido” al que ahora se dejará al PP.

Durante su intervención, el presidente en funciones también explicó que el ejercicio de 2008 terminó con un “elevado grado de ejecución sobre el presupuesto inicial y final, que alcanzó el 91 por ciento.

Previamente, explicó que el grado de ejecución de 2008 frente a 2007 también se incrementó en el total de gasto financiero, al pasar de 2.322,5 millones, en 2007, a 2.543,8, en 2008. Además, en la legislatura (entre 2005 y 2008) este mismo capítulo experimentó un 49 por ciento más frente a la anterior (2001-2004), al pasar de 6.027,2 a 8.990,2 millones de euros.

Así, Touriño resumió los datos en “cuatro ideas” básicas, de forma que en esta legislatura se registró “menor nivel de gasto y de compromisos” frente al periodo anterior; “más nivel de liquidez, menor nivel de endeudamiento por PIB y mayor nivel de inversión”. “Menos compromisos, más dinero en la caja”, ilustró, y apostilló: “Y no cito la crisis económica”.

En su penúltima reunión, el Consello aprobó el proyecto sectorial de incidencia supramunicipal promovido por Insuíña para realizar la segunda ampliación de la granja marina existente en la playa lucense de Lago, en el ayuntamiento de Xove. La piscifactoría se dedicará al preengorde y engorde de rodaballo, del que producirá unas 3.200 toneladas anuales, y generará 90 empleos, entre directos e indirectos.