En 2003 un terremoto de 6,7 grados asoló Argelia y produjo un tsunami que causó daños materiales en los puertos baleares. Si hoy se reprodujese el seísmo de Lisboa que sumó más de 60. 000 víctimas en 1755 otra ola gigante volvería a inundar la Bahía de Cádiz. Estos fenómenos pueden volver a repetirse, por lo que existe un proyecto de investigación nacional para determinar los daños que provocaría un tsunami en las costas del sur de España y el Mediterráneo, las más expuestas. En el estudio participan el Real Instituto y Observatorio de la Armada, en San Fernando, la Complutense y el Instituto Geológico de Cataluña. Algunos de los datos ya están en manos de Protección Civil para que elabore protocolos de emergencia.

-¿En qué zonas es más alto el riesgo de sufrir un tsunami?

-Además, del sur de España, la zona de Baleares y el delta del Ebro.

-¿Sería posible en Galicia?

-No provocado por terremotos, pero sí por algún fenómeno que se registrase en el océano Atlántico como deslizamientos submarinos.

-¿Qué parte del estudio le ha correspondido a su grupo de investigación?

-Nosotros utilizamos los datos de las estaciones GPS del sur de España y el norte de África para determinar la velocidad y cómo se deforma el territorio en la región íbero-magrebí. La novedad es que también hemos desarrollado tecnología para crear sismógrafos y mareógrafos GPS que ofrezcan datos en tiempo real y revelen cómo se mueve la tierra por el seísmo y la carga de marea que origina un tsunami con vistas a su incorporación en la red de alerta.

-El objetivo final es el de elaborar planes de emergencia.

-Los expertos decimos que hoy no se puede predecir un terremoto, sino prevenir los efectos. Se trata de saber qué podría ocurrir y el efecto combinado de un terremoto con tsunami, determinar qué estructuras habrían sobrevidido... Con esta información las autoridades de emergencia, como Protección Civil, elaborarán planes de prevención. No se puede evacuar una ciudad en los 35-40 minutos que tarda en llegar un tsunami a la costa. El terremoto de Lisboa de 1755 inundó toda la costa de la península y provocó olas de seis metros que inundaron la ciudad de Cádiz. Hoy viven en ella más de cien mil personas. El seísmo de 2003 de Argelia produjo destrozos en puertos de las islas de Baleares por valor de mil millones de pesetas.

Estudios sobre contaminación, glaciares e incendios

Los otros dos responsables del proyecto de riesgo sísmico y tsunami -Elisa Buforn, de la Complutense, y Antoni Roca, del Instituto Geológico de Cataluña- también comparecieron ayer en el campus de Vigo para dar cuenta de sus estudios dentro de las jornadas de seguimiento del programa nacional de Ciencias de la Tierra del Ministerio de Ciencia.

Alrededor de ciento veinte investigadores de universidades españolas y centros de investigación públicos como el CSIC expondrán hasta el viernes los resultados de sus investigaciones de la convocatoria de 2006 en campos como la estratigrafía, la paleosismología, la cartografía, aludes de nieve y glaciares o los efectos de la contaminación y los incendios forestales en los suelos.

Apertura

La reunión fue inaugurada ayer por la jefa del área de Medio Ambiente del Ministerio de Ciencia, Lourdes Armesto, el vicerrector de Relaciones Institucionales, Iván Area, y el catedrático vigués Federico Vilas, responsable de las jornadas y gestor nacional del programa de Ciencias de la Tierra.

Entre los ponentes figura Luisa Andrade, que encabeza un grupo de investigación sobre agrobioloxía ambiental, y que presenta en las jornadas los resultados de una investigación sobre el comportamiento de sustancias contaminantes en suelo.