La llegada de un nuevo temporal de nieve vuelve a hacer saltar la alarma en Galicia. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó ayer la alerta naranja -que se prolongará hoy y mañana- por riesgos de nevadas en la provincia de Pontevedra. Además, avisó de que este mismo nivel de alarma, de riesgo importante, será extensible para toda la costa gallega, por un vendaval en el litoral.

En concreto, las predicciones informan de que la cota de nieve en el interior de Pontevedra, la provincia más afectada, se situará entre los 800 y los 1.000 metros, donde se podrán acumular hasta 10 centímetros de espesor. No obstante, a lo largo de la jornada de hoy, y hasta mañana, la cota descenderá y podrá nevar por encima de los 600 metros.

Por su parte, en Ourense, la alerta es de nivel amarillo, también por nieve. Esta vez, Lugo y A Coruña, salen mejor paradas. Durante la jornada de hoy, no tendrán ninguna alarma activada, situación que cambiará mañana en ambas provincias, ya que se verán afectadas por una alerta amarilla por vientos fuertes en el mar. Además, en la montaña de Lugo podrán registrarse nevadas mañana, mientras que en A Coruña habrá un riesgo bajo de precipitaciones y rachas de viento en tierra, que podrán alcanzar los 80 kilómetros por hora.

Por su parte, la alerta naranja en todo el litoral gallego desde ayer se debe a la posibilidad de olas de entre 4 y 5 metros, provocadas por vientos en mar que sobrepasarán los 60 kilómetros por hora, y que alcanzarán fuerzas especialmente elevadas al sur de las Islas Sisargas. La zona de Bares será también otra de las principales afectadas por el vendaval.

En el resto de la costa gallega, el viento soplará entre los 50 y los 60 kilómetros por hora, lo que provocará marejadas, que podrán aumentar a mar gruesa en algunos puntos.

Por todo ello, la dirección xeral de Protección Civil de la Xunta de Galicia, alertó ya a los ayuntamientos que se sitúan por encima de los 500 metros en Ourense y Pontevedra, además de al resto de administraciones competentes y empresas que puedan ver su actividad comprometida por este fenómeno meteorológico.

En este sentido, recordó a la población las "medidas de autoprotección" en estas situaciones. Entre ellas, aconseja extremar la precaución en las carreteras, que podrían tener placas de hielo, e informarse del estado de las carreteras antes de iniciar un viaje. La Xunta advierte también a los ciudadanos de que no se acerquen a los diques, para evitar un golpe de mar que pueda arrastrar a coches o personas.