La Asociación para la Defensa del Turismo (Asdetour) recomendó hoy a los más de 700 españoles afectados por los retrasos y cancelaciones en el aeropuerto de Roma-Ciampino que presenten una reclamación formal cuando lleguen a sus lugares de destino para acceder a la indemnización correspondiente, que podría alcanzar los 400 euros.

La asesora legal de la asociación, Esther Alós, recordó en declaraciones a Europa Press, que los afectados tienen derecho a una indemnización siempre y cuando el retraso no haya sido motivado por "una fuerza mayor imprevisible", como las circunstancias meteorológicas, según el reglamento 261/04 de Derechos de los Pasajeros en la Unión Europea en vigor desde 2004, y que consistiría en la devolución del precio del billete.

Alós aseguró que, aunque el parámetro de fuerza mayor "no es muy objetivo" según se recoge en la Ley, y "habrá que estudiar cada caso", en situaciones como el aplazamiento y cancelación de vuelos ante un aterrizaje de emergencia que ha motivado el cierre del aeropuerto, se accede a una indemnización sin problemas.

Para ello, esta abogada reiteró que además de la reclamación previa en el aeropuerto de Roma es aconsejable que presenten una nueva reclamación formal en sus lugares de destino y apuntó que "una reclamación conjunta" con otros pasajeros "tiene mucho más peso" en estos casos.

Asimismo, señaló que igualmente los afectados tienen derecho a reclamar los gastos incurridos por alojamiento y mantenimiento durante los días que permanezcan en Roma hasta que puedan viajar, en el caso de que "no hayan sido ya sufragados por la compañía aérea".

No obstante, indicó que la aerolínea queda eximida de toda responsabilidad con aquellos viajeros que debían realizar conexiones con otros vuelos, ya que los "vuelos son independientes", por lo que estos pasajeros tendrán que presentar otra reclamación.

Para aquellos turistas que optaron por regresar por carretera, alquilando un coche, o cogiendo otro vuelo por su cuenta, esta experta explicó que este tipo de gastos quedarían fuera de dicha reclamación, ya que el billete es un contrato que fija la fecha y la hora de salida, así como el origen y el destino del vuelo, que son las obligaciones a las que está sujeta la aerolínea.