Su despacho está en Madrid. Pero Manuel Almenar no se limitará a estar sentado tras una mesa de trabajo. El ya ex presidente de la Audiencia Provincial de Pontevedra acaba de ser elegido, junto a Margarita Uría, vocal delegado del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para Galicia, Asturias y País Vasco. Y dedicará un día a la semana a recorrer todos los partidos judiciales de su competencia para "conocer de primera mano" los problemas existentes y erigirse en portavoz de todas estas demandas. Tras visitar el TSXG, el pasado jueves estuvo en Ourense y así continuará con una ronda de contactos que lo traerá a los juzgados vigueses a finales de mes. Todo para impulsar la adopción de medidas que den como resultado una justicia "más moderna, eficiente y transparente" y, sobre todo, que ofrezca el mejor de los servicios a los ciudadanos.

-La vocalía de Galicia le llega tras casi 20 años ejerciendo como magistrado en esta comunidad. ¿Cómo definiría la situación de la Justicia?

-En Galicia la situación no se puede tildar de negativa, pero es mejorable. Tenemos unas ratios de pendencia, de capacidad resolutiva, de ingreso de asuntos y de tiempos de respuesta que debemos mejorar si queremos prestar un servicio de calidad. Para ello el CGPJ está elaborando un plan director que se pretende tener previsto en enero de 2009 y en el que se establecerán los objetivos a conseguir en estos cinco años para sentar las bases de una Justicia moderna en toda España.

-¿Con qué peculiaridades se enfrenta la Justicia en Galicia?

-Existen una serie de parámetros que hay que tener en cuenta a la hora de abordar soluciones. Uno es la dispersión de los núcleos de población, que provoca dispersión geográfica de juzgados. Otro es el tipo de litigiosidad, muy ligada al derecho de propiedad, es decir, a las aguas, a la tierra... Se basan en la prueba de los hechos más que en el derecho y llevan más tiempo de tramitación, por lo que que plantean al juez problemas más complejos. Cuando se dice que los módulos de un juez deben ser x, hay que ver que no es lo mismo hablar de asuntos de resolución automática, como los de morosidad, o de otros más complejos, como los típicos de aquí por su naturaleza.

-¿Qué juzgados son prioritarios para esta comunidad?

- Al margen de los que se van a crear en diciembre, ya se fijaron las unidades judiciales que empezarán a funcionar en 2009: dos plazas en la Sala de lo Contencioso del TSXG, una en la Sala de lo Social, un juzgado de lo Mercantil y otro de lo Social en A Coruña, un juzgado en Ferrol, un juzgado de Familia en Vigo, otro de Primera Instancia e Instrucción en Lugo y otro en Tui. Y tan pronto como sea posible hay que crear juzgados en Vilagarcía y Betanzos, juzgados de Primera Instancia en A Coruña y Vigo, así como una plaza de magistrado en la Sección Sexta de Vigo y servicios comunes de ejecutorias en Vigo y A Coruña. Y también juzgados de Violencia Doméstica: a Santiago y Pontevedra deberían sumarse Ourense y Lugo. Trabajaré para que Galicia logre los juzgados que necesita.

- Habla de una plaza de magistrado en la Sección Sexta. ¿No es posible ir más allá y crear una nueva sala, como se reclama desde hace años en Vigo?

-Con los datos de entrada de asuntos -el año pasado fueron 1.196- se puede justificar el quinto magistrado, pero no el sexto, que es el que permitiría la duplicidad de secciones. Esto sin perjuicio de los datos que se obtengan a final de año. En todo caso, mientras no se crea la quinta plaza se adoptarán medidas de refuerzo para disminuir los tiempos de respuesta, que están en 14 meses. En el resto de las secciones este plazo se sitúa entre uno y tres meses.

-¿Y el Mercantil? Es otra vieja demanda de Vigo.

-Por ahora es suficiente con los de Pontevedra. A medio plazo habrá que pensar en su creación o incluso a corto plazo, dependiendo de la crisis económica. En Vigo hay prioridades más urgentes: el juzgado de Familia, que es absolutamente necesario ya que los dos que hay están por encima de los módulos pese al esfuerzo de los magistrados; la plaza de la Sección Sexta y un juzgado de lo Social.

-Precisamente uno de los juzgados de Familia de Vigo sigue sin magistrado titular por falta de candidatos

-Hay una carencia de jueces acusada. Eso provoca que muchos órganos judiciales que salen a concurso queden vacantes. Y efectivamente los juzgados de Familia de Vigo superan el módulo de asuntos en casi un 12%. Además abordan procedimientos que tienen una ejecución que dura años: pensiones, regímenes de visitas... Su carga competencial y emocional exige más esfuerzo y es más fácil que los jueces opten por otros juzgados.

-¿Faltan más jueces en Galicia que en el resto del país?

-La situación es similar; lo que pasa es que aquí hay una mayor rotación que provoca que existan más vacantes temporales.