En el último semestre, un centenar de los más de 26.000 conductores condenados ingresaron en prisión, lo que supone un 0,26% de los infractores cazados. Muchos de los encarcelados contaban con la suspensión de sus penas por delitos anteriores de otro ámbito y entraron en prisión tras cometer alguna de las infracciones penadas por el actual Código. Según los datos de Instituciones Penitenciarias a 30 de junio, 1.741 reos permanecen en prisión por delitos relacionados con la seguridad vial, más de un centenar en cárceles gallegas. El 94% de las condenas en España (25.208) han sido resueltas de conformidad entre abogado defensor y fiscal. El 93% de los juicios por delitos de tráfico se tramitó por la vía rápida -sentencia al momento, retirada del carné, multa y trabajos en beneficio de la comunidad-. Los que se tramitan en juicios rápidos pero que no son resueltos por conformidad, tardan en obtener una sentencia una media de dos semanas; mientras que la vía convencional lleva entre seis y diez meses.