Javier Sánchez de Dios / Santiago

Mientras se anuncia que los inmigrantes podrían participar en las próximas elecciones municipales, sigue sin resolverse la cuestión de los emigrantes, y especiamente el intento de garantizar sus votos mediante el sistema de depositarlos en urna. ¿Creen que hay que acelerar este asunto?

- javier montero. Bueno, vamos a ver: desde un puntode vista estrictamente formal, parece claro que lo que hay que garantizar en el ejercicio del derecho al voto es que se realice de una forma ordenada y con todas las garantías precisas de libertad para votar y de seguridad para que se haga el recuento. Y no parece que en este momento se pueda hablar en serio de que el sistema de ejercicio del voto tenga las debidas garantías ni el de envíos, aunque en eso se haya ido a mejor en los últimos tiempos. Pero para mí está claro que el derecho a votar debe ejercitarse en una urna, en la medida en que garantiza mejor que otros sistemas el recuento normalizado. Otra cosa diferente es el debate sobre si los emigrantes han de tener o no derecho a votar y en qué elecciones.

- Xosé M. castelao. A mí me parece que hay que tratar la cuestión de los emigrantes desde el respeto, y creo que se les está faltando al respeto muchas veces al enfocar determinadas cuestiones. Parece como si se rebajase su condición de ciudadanos cuando se plantea al colectivo de la emigración como más susceptible de manipulación que otros ciudadanos coin los mismos derechos, que otros colectivos, estén donde estén. Dicho eso añadiré que el voto en urna es naturalmente un procedimiento mejorable pero que visto el mal resultado del sistema de voto por correo, porque los servicios en algunos países iberoamericanos son deficientes, es preferible la urna, a pesar de la complejidad que puede conllevar instaurarlo en países con amplia representación de emigrantes, y muy repartidos geográficamente, además.

- xan lópez rico. Eu quero dicir en primeiro lugar que a min esta discusión que formulan agora mesmo os partidos estatais, PP e PSOE, paréceme unha grande hipocresía. É ben certo que en todos estes anos uns e outros, que ocuparon o goberno do Estado poideron facer as modificacións e as reformas lexislativas correspondentes para garantir o exercicio do dereito ao voto que teñen agora mesmo os cidadáns españois, residan onde residan. Unha hipocresía que é aínda maior por canto plantexase esta cuestión non porque se quera atender mellor ós dereitos dos emigrantes, senón porque, na miña opinión, agora poden ter unha repercusión maior nos resultados e polo tanto na formación do goberno. De ahí que algúns discutamos a cuestión principal, que é o dereito a voto dos emigrantes.

-Es posible que se reabra la discusión sobre el derecho al voto...

- montero dongil. Yo soy partidario radical de la contaminación, en el sentido de la implicación de todos con todos y creo además que cada vez vamos a ser más favorablemente contaminados en ese sentido. Y a partir de ahí, ahora se da la circunstancia de que nos hemos convertido en país de inmigración después de haber sido de emigración. Y discutimos el derecho de los inmigrantes a depositar su voto al tiempo que analizamos como debe ejercerlo, y si pueden incluso, los emigrantes nuestros. Hay de todo. Porque tenemos que hablar también de los nacionalizados españoles, incluso los extracomunitarios que son españoles pero que tienen dificultades para ejercer sus derechos, voto incluído.

- castelao. Cuando hablamos sobre si los emigrantes pueden o no pueden votar hace falta una reflexión previa sobre lo que se quiere, lo que quieren Galicia y España. ¿Quiere o no proyectarse por sus vínculos de sangre o por su supuesta condición de potencia? Si pretendemos una presencia en el mundo por nuestra potencia empresarial o económica, aunque a mí eso me produce alguna sonrisa, estupendo, pero si queremos asentarnos en la sangre, en lo común, el enfoque es diferente. Y eso hay que pensarlo bien porque los resultados que se obtengan serán muy distintos en una comunidad que es cada vez más influyente, e incluso decisiva.

- lópez rico. Quero deixar moi claro que eu son contrario ao voto dos emigrantes. Estou en contra de que os emigrantes voten, pero en ningún dos procesos; nin o municipal, nin o autonómico, nin o xeral. Aquí se están a utilizar torticeiramente os sentimentos mesturando racionalidade e outras cousas. Non hai ningunha dificultade para que os fillos ou os netos dos emigrantes obteñan a nacionalidade española pero non necesariamente a nacionalidade implicaría dereito ao voto: os españois menores de 18 anos tampouco poden votar e non deixan de ser españois.

-Se ha hablado de derechos sociales antes que políticos. Y de censos e influencia del CERA...

- montero dongil. Hay que hablar de todo esto, de los que están aquí y de los que están fuera, y es un asunto que debe resolver la legislación, incluso la comunitaria. Y por cierto, plantear también la cuestión de los censos, que a medida que se da la nacionalidad a hijos y nietos van a ir incrementándose, su repercusión será cada vez más importante, y pueden llegar a ser decisivos. Nosotros hemos pactado con la Xunta la creación de una Fudación, que quizá se ubique en Buenos Aires, para captar un determinado segmento de ciudadanos y formarlos y atender algunas necesidades que tiene Galicia. ¿Reconocimiento del derecho al voto? En mi opinión hay que cerrar el crecimiento de la ciudadanía por sangre que, expresión que, por cierto, no me gusta.

- castelao. Yo les pido que entiendan que en la medida en que España y Galicia se acerquen a nosotros, nosotros tendremos mucha más capacidad para enseñar a nuestros hijos y nietos sobre lo que son y de dónde proceden. Porque no es fácil hacer eso, ni es fácil hacer entender que además de donde se nace hay que aprender a respetar otro país de donde se procede. En política hay que tomar decisiones, pero sobre todo hay que definirse. Si queremos la unión con los nuestros estén donde estén, si se quiere llegar a constituir esa comunidad de gallegos en el mundo de la que tantas veces hemos hablado, hay que ser más generosos y trabajar con y para ellos no sólo en periodo de elecciones. Y por supuesto sin recortar los derechos que nos asisten.

- lópez rico. Eu sería máis partidario da suspensión do voto ao pasar un determiñado tempo fora do país: ao pasar uns anos, cinco por exemplo, perden ese dereito e cando regresen o recuperan. Non hai que facer esa demagoxia de que nos estamos a esquencer da emigración, porque non é iso. Creo que esa atención ao nacional debe implicar apoio social, de sanidade, de dereitos pasivos, etcétera, que os emigrantres e os seus fillos teñan a mesma oportunidade que os demáis ao benestar social e atención por parte da estrutura do Estado pero eu penso que o dereito a voto está ocultando que non hai esas outras atencións. E non quero deixar de insistir, os dereitos sociais son máis importantes cós electoráis; noutros países democráticos europeos xa é así.

-Se han criticado como "fobia" las restricciones al voto...

- montero dongil. No creo que se pueda hablar de fobias o de filias, sino de sentido común. Se han dado tantos pasos en la extensión que ahora no queda más remedio que analizar cómo parar eso, francamente. Acaba de aprobarse un proyecto de legislación europea de cara a la inmigración que limita incluso la agrupación familiar a los familiares directos, a la familia nuclear. En Europa están cerrando las compuertas, y es preocupante que se pueda incurrir en excesos, pero demuestra que es necesaria una reflexión serena y sosegada, que se aleje de tópicos pero también de supuestos que no siempre son razonables.

- castelao. No comparto la tesis contra el voto porque parte de la idea de que quienes votan fuera desconocen la realidad de lo que votan, y no es así. Yo no he visitado algunos lugares, pero creo que los conozco lo bastante para opinar. Y aparte de eso tengo que decir que el grado de conocimiento que tenemos en Galicia sobre lo que saben de este país sus emigrantes está equivocado: ellos saben mucho más de Galicia que Galicia de ellos, créame. Pero aparte de eso, no se pueden recortar derechos porque se empieza y no se sabe por dónde se va a terminar. Y hay muchos emigrantes que tienen más interés en votar que muchos aquí residentes.

- lópez rico. O dereito ao voto exterior é un factor moi perturbador segundo o resulltado que se obteña da situación no interior, e canto máis se descende esa perturbación se incrementa. E se falamos de xente que nunca viviu en Galicia estamos falando dun absurdo. O que pasa é que ningún partido político vai dicir isto que estou dicindo eu, porque non está ben visto. É pouco rendible electoralmente e poderían xurdirlle problemas, pero o debate, creo eu, hai que facelo así, con esta frialdade que pode parecer desprezo pero que non o é en absoluto. En todas as familias de Galicia hai xente na emigración, na miña tamén; o meu pai naceu na Habana. Eu sinto o maior aprezo e respecto os seus dereitos e non comparto a tese europea, pero hai que debater este asunto con calma e prudencia.