Víctor Rodríguez / Ourense

El senador del BNG Xosé Manuel Pérez Bouza y la Asociación para la Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega) coincidieron ayer al acusar a la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, de "engañar a los ourensanos" con el proyecto de la central de San Estevo II, en el ayuntamiento ourensano de Nogueira de Ramuín, de la empresa Iberdrola, al darle el visto bueno a la declaración de impacto ambiental el 23 de mayo, y declarar, sin embargo, el 3 de julio en Ourense que "no había firmado ninguna autorización de aprovechamiento hidrológico en el Cañón del Sil".

El proyecto de San Estevo II es uno de los dos proyectos que ambiciona Iberdrola en el río Sil. El otro es el de Santa Cristina, pendiente de la declaración de impacto ambiental, y que consiste en construir presas reversibles, un sistema de bombeo de agua durante la noche hasta unas balsas, para posteriormente turbinarla durante el día. Pérez Bouza sostiene que es un "procedimiento puramente especulativo", ya que la empresa se beneficia del diferencial de tarifa eléctrica entre la noche (40 euros por megavatio/hora de media), y el de día (90 euros), según los datos aportados.

Una "enorme rentabilidad" para las grandes compañías eléctricas que se producirá a costa de un "enorme e irreversible impacto paisajístico y medioambiental", pues supone la perforación de los cañones del Sil y del Miño, así como la construcción de enormes balsas, que es lo que pretende Iberdrola en Santa Cristina.

Desde Adega aseguran que los dos proyectos de Iberdrola son un ejemplo de "insostenibilidad" al afectar "gravemente" al medio ambiente y al sector turístico de la Ribeira Sacra. Y advierten de que estas obras "generarán más de 220.000 metros cúbicos de escombros y sedimentos" que irán a parar a un ecosistema protegido, al formar parte de la Red Natura 2000, al ser un Lugar de Interés Comunitario (LIC).

Ante esta situación, Pérez Bouza acaba de solicitar la comparecencia en el Senado de la ministra de Medio Ambiente, la gallega Elena Espinosa, para que aclare y explique su posición en relación a los cuatro proyectos de aprovechamiento hidroeléctrico en el Sil y en el Miño.

Por otra parte, la Consellería de Innovación anunció ayer su rechazo a estos cuatro proyectos. Y en el caso del de San Estevo II, de la empresa Iberdrola, explicó que los informes elaborados y remitidos a la Confederación Hidrográfica del Norte fueron desfavorables, aunque no pertenecen a la planificación energética gallega, al ser una competencia del Estado.

El departamento de Fernando Blanco sostiene que los cuatro proyectos presentados, tanto por Iberdrola como por Unión Fenosa, "restarán capacidad de evacuación de electricidad producida por el propio sistema energético gallego".