Quintana renuncia a presidir la subcomisión de obras del AVE

En opinión de Quintana, "para que podamos salir de toda esta cuestión con éxito, es fundamental que en Galicia exista una posición unitaria y firme de todas las fuerzas políticas".

Quintana explicó en declaraciones a los informadores que tiene ese convencimiento "más allá de un convencimiento nacionalista", sino por "un convencimiento pragmático que me da la experiencia de la relación con el Gobierno del Estado, sea del color político que sea".

El portavoz del BNG recordó que hay un acuerdo en el Congreso que establece los plazos hasta el 2012 y otro para la creación de una subcomisión de seguimiento "para asegurar que el Estado cumple con sus compromisos y ahí es donde parece haberse producido un desacuerdo".

Por ello, anunció su renuncia a presidir la delegación gallega cuando se constituya la subcomisión.

También señaló que el PP ha solicitado participar en ella, ante lo que el vicepresidente del Ejecutivo autónomo expresó su "total disposición", con "la fórmula que en su día se adopte", que "bien puede ser una participación directa en la subcomisión o una participación en un grupo de trabajo que defina la postura que Galicia tiene que defender después".

En opinión de Quintana, una vez tomada esta decisión, "ya no hay obstáculos para la unidad, ya no hay ningún problema, ya están resueltas todas las dudas que podía haber", por lo que pidió que "dejemos de pelearnos entre nosotros, dejémonos de peleas absurdas y coloquemos la pelota en el tejado del señor Zapatero".

Además, demandó la convocatoria de la comisión bilateral para crear la subcomisión de seguimiento y que, en la primera reunión, el Gobierno se ratifique en los plazos o diga que no son posibles y proponga otros, "con toda valentía y con toda la claridad" y los acompañe de un "plan de inversiones que los haga creíbles".

"La delegación gallega en ese momento -agregó- decidirá si esos plazos son asumibles o no, pero llegó el momento de pedir claridad y, sobre todo, de pedir sinceridad y transparencia", insistió.

Preguntado si, entonces, el problema era la presidencia de la delegación, señaló que él cree que no, "que no era un problema, pero, por lo visto, esa era la discrepancia, cómo había que hacer la comisión y se habló de protagonismos, que si iba Quintana, que si... pues resuelto el problema, dos no pelean si uno no quiere".

En cuanto al carácter gubernamental de la comisión, Quintana explicó que "todas las fuerzas políticas estamos de acuerdo con el Presidente y ninguna fuerza política en Galicia planteo otra cosa diferente a lo que propuso ayer el Presidente: la comisión de seguimiento tiene que ser una comisión entre Gobiernos".

Insistió en que "la subcomisión que se plantea es precisamente una subcomisión en el ámbito de la comisión bilateral, por lo tanto una subcomisión entre Gobiernos. Nunca nadie planteó otra cosa, ni siquiera el PP".

Agregó que lo que ha pedido el PP es participar en esa subcomisión, en la delegación gallega, y reiteró que "sería bueno que participara y tenemos que buscar la fórmula para que participe".

Sobre la existencia de desconfianzas, consideró que existen "porque hay una evidencia, hay unos plazos pactados y es evidente que vamos con retraso con esos plazos, si no, no estaríamos con toda esta historia".

Finalmente, a preguntas sobre la posición del PSOE en el Congreso, Anxo Quintana expresó su opinión de que "el partido socialista se equivocó en su día en el Congreso. En eso coincido con el Presidente Touriño, que habló de falta de cintura. A todos nos puede pasar", pero "yo me quedo con lo positivo de esto, yo creo que el partido socialista en Galicia sí apoya esa resolución".

El dirigente nacionalista concluyó que, "si en un momento dado faltó cintura política para aceptar una resolución unánime, ahora lo que tiene que haber es el sentidiño necesario para que esa unidad sí se produzca en Galicia".