La demanda actual de vivienda en Galicia asciende a 47.000 pisos, según un estudio elaborado por la Xunta. El problema es que la lentitud de los municipios en aprobar sus planes de ordenación urbana frena la disponibilidad de suelo para que los promotores puedan construir. Por esta razón la Consellería de Vivenda ha decidido intervenir directamente sobre la planificación municipal, comprando terrenos y calificándolos como suelo residencial para vivienda protegida. Su objetivo es edificar 45.191 pisos públicos en diez años y para ello movilizarán 8,7 millones de metros cuadrados. El vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, calcula que este plan de actuaciones generará un volumen de inversión de 5.200 millones de euros y casi 300.000 empleos.

La conselleira de Vivenda, Teresa Táboas, dejó claro que la construcción de estos 45.000 pisos será sólo una parte de las viviendas públicas que se podrán construir en Galicia en los próximos años, ya que recordó que la Lei de Medidas Urxentes en Materia de Solo obliga a los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes a reservar el 40 por ciento del suelo para pisos protegidos.

Sin embargo, para aplicar este porcentaje los municipios deberán primero aprobar sus respectivos planes municipales adaptados a esta nueva normativa. De momento, sólo Vigo tiene una planificación urbanística en la que ya se reserva el 40 por ciento del suelo para vivienda protegida.

"El principal obstáculo que hay para construir pisos públicos es el suelo y como tengamos que esperar por los planeamientos urbanísticos tendríamos que esperar mucho", explicó Quintana.

Con el nuevo "Plan Galego de Suelo Residencial" se atenderán las necesidades más urgentes de vivienda. Xunta y municipios negocian ahora la localización exacta de los terrenos para construir los 45.000 pisos públicos. Aunque el plazo temporal que se establece son diez años, la mayoría

-30.500- se edificarán ya en el primer quinquenio.

Estudio

Para planificar donde y cuántas viviendas se deben construir, el departamento de Táboas ha elaborado un estudio sobre la demanda actual de pisos y ha realizado una proyección de los inmuebles que se van a necesitar en el futuro.

Ahora mismo son 47.000 los pisos que se necesitan para cubrir la oferta, pero dentro de diez años la demanda ascenderá a 258.000 viviendas. El cálculo lo realizan cruzando los datos de población estimada en la próxima década con la evolución del mercado laboral. Vivenda cree que Galicia deberá recurrir en el futuro a trabajadores del extranjero y eso supondrá la creación de hogares nuevos.

Con la construcción de las 45.000 viviendas proyectadas por la Xunta, Táboas recuerda que ya se cubrirá al menos el 20 por ciento de las necesidades futuras de 258.000 pisos. El 45 por ciento de los inmuebles que promoverá Vivenda serán de tres habitaciones y el 30 por ciento de dos. Para adquirir los terrenos el Gobierno gallego calcula una inversión de 1.593 millones de euros.