La iniciativa se concretó con la firma de un protocolo de colaboración entre la Consellería de Vivenda y la Intendencia Municipal de Montevideo, que preside Ricardo Ehrlich. "Es una manera de reconocimiento y solidaridad con Uruguay, un país que tiene acogido a tantos gallegos durante el siglo pasado, que vinieron a este país en busca de una vida mejor", explicó Táboas.

Esta actuación, aprobadas en diciembre de 2007 por el Consello de la Xunta, forma parte de la línea de trabajo de cooperación exterior en materia de vivienda llevada a cabo por la consellería, que ya suscribió convenios similares con otros países como Nicaragua y Palestina, que se canalizan a través del Fondo Galego de Coooperación Exterior.

El importe total de las acciones previstas asciende a 723.000 euros, de los que el departamento autonómico aporta el 55 por ciento, 400.000, para la autoconstrucción de estas 64 viviendas. En las obras de construcción participan los propios vecinos para implicarlos en la mejora de su entorno y en su cuidado posterior, tal y como le explicaron a la conselleira miembros del equipo coordinador de la Intendencia Municipal de Montevideo.

ENCUENTROS.

Además, Teresa Táboas mantuvo varias reuniones con autoridades locales y estatales, entre las que estuvo la del ministro de Vivienda de Uruguay, Carlos Colacce, con quien intercambió información y propuestas sobre las políticas de vivienda en ambos países.

El ministro uruguayo mostró especial interés en las políticas de rehabilitación en el medio rural, ya que la realidad de este país sudamericano es similar a la gallega y podrían arbitrar medidas y líneas de ayuda parecidas a las puestas en marcha en Galicia.

La conselleira también tuvo un encuentro con la Asociación de Empresarios Gallegos en Uruguay, a los que les explicó la política en materia de suelo empresarial que está desarrollando la Xunta, en particular en las siete grandes ciudades y sus áreas de influencia.