Una fragata española que navegaba por el Mar Rojo puso rumbo anoche a la zona del incidente para auxiliar al pesquero. Las autoridades españolas calculan que la nave llegará a la zona dentro de las próximas 48 horas.

El barco atunero español "Playa de Bakio", con 26 tripulantes -trece españoles y trece africanos-, fue abordado y secuestrado por un grupo de piratas a 250 millas de la costa de Somalia, presuntamente para lograr dinero a cambio.

Amadeo Álvarez, uno de los tripulantes del pesquero, dijo hoy a su esposa que se encuentra bien y que no hay heridos en el buque, según confirmó a Efe la hija del marinero, Rosa María.

Este tripulante, que lleva cuatro meses en alta mar y tenía previsto regresar el próximo 30 de abril, pidió a su familia que esté tranquila y le insistió en que no hay heridos en el buque.

La embajada de España en Kenia, que también representa los intereses españoles en Somalia, esta realizando gestiones con autoridades locales para tratar de poner fin al secuestro del pesquero.

Representantes de un Consejo de Ancianos de Somalia también están intentando mediar en el secuestro, según dijo a Efe desde Kenia Andrew Mwangura, director del Programa de Asistencia a Navíos del Este de África, una entidad que sigue de cerca los numerosos actos de pirateo que se producen continuamente en las costas de Somalia.

En la mayoría de los casos este tipo de secuestros tienen un móvil económico, y en muchos de ellos son representantes de los Consejos de Ancianos, muy respetados en Somalia, los que se encargan de mediar entre las partes.

Según Mwangura, los atacantes son oriundos de Bareda, una población situada en la región de Puntlandia, en cuyas costas se registran la mayoría de los actos de piratería de Somalia.

Es el Consejo de Ancianos de Bareda el que está mediando en las negociaciones, de acuerdo con la misma fuente.

El patrón de la nave dijo a varios medios que los piratas están forzando a la embarcación a trasladarse hacia la población de Obbia, a mitad de camino entre Bareda y la capital somalí, Mogadiscio.

El gobierno español ha creado una célula de seguimiento e información en el Estado Mayor de la Defensa para lograr la rápida liberación de los tripulantes.

Además, realiza intentas gestiones con organismos y con países aliados que tienen presencia militar en la zona.

La presidencia eslovena de la UE mostró hoy su "gran preocupación" por los ataques piratas en aguas somalíes y advirtió que estos sucesos obstaculizan los esfuerzos para la estabilidad del país y dificultad el reparto de ayuda humanitaria extranjera.

Militares españoles y de la OTAN permanecen en contacto permanente para intercambiar información sobre el secuestro del pesquero español, informó a EFE un portavoz de la organización.

La Alianza no ha recibido por el momento ninguna petición para organizar una operación de rescate, según la fuente.

Agentes especializados francesas liberaron el pasado 12 de abril a los 30 miembros de la tripulación del velero de lujo "Ponant", secuestrados desde hacia una semana frente a las costas de Puntland, y lograron capturar a seis de los piratas.

Somalia no cuenta con un auténtico Gobierno central desde el derrocamiento en 1991 del dictador Mohamed Siad Barré.

Durante el pasado fin de semana se produjeron fuertes combates en el país entre tropas gubernamentales, apoyadas por Etiopía, e insurgentes islámicos, con mas de 80 muertos y un centenar de heridos.