Setenta y dos horas después de que los diputados y senadores tomasen posesión de sus escaños en Madrid, el líder del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, ya puso a trabajar a los suyos, y en clave galleguista. Reunió ayer por la mañana a sus 23 parlamentarios y los conminó a ser "útiles a Galicia" y a ser quienes "pongan el acento gallego en las Cortes", pues en su opinión el BNG, con sus dos escaños, resultará "irrelevante" y los socialistas gallegos optarán por "la complacencia" a Zapatero.

Feijóo animó a su equipo a "trabajar con humildad y sacrificio", presentando iniciativas a favor de Galicia, "pero también apoyando iniciativas de otros que favorezcan a Galicia" y yendo en contra de propuestas que perjudiquen a la comunidad. El líder del PPdeG remarcó que dirige una organización que en sus estatutos se define como "partido galleguista y reformista" y aseveró que los diputados y senadores del PPdeG en Madrid tienen "un compromiso con Galicia dentro del PP".

Feijóo marcó las pautas de trabajo de los parlamentarios del PP gallego y les puso trabajo. Deben presentar "alternativas" para salir a la crisis económica, para impulsar las infraestructuras en la comunidad, para mejorar la financiación autonómica, para que los emigrantes puedan votar en urna y para dotar de mayores medios Salvamento Marítimo.

El presidente del PPdeG solicitó a los diputados y senadores de su partido que trabajen, pero tan importante como eso, que "visualicen su trabajo", pues las elecciones autonómicas están a la vuelta de la esquina y Feijóo ve posible regresar a la Xunta si todos en el partido trabajan. Por ello, pidió "tesón".

"Ajustes locales"

Para encarar con éxito los comicios gallegos, que podrían celebrarse en marzo del próximo año para no coincidir con las elecciones europeas, el líder de la oposición no sólo apuesta por el trabajo. Feijóo considera necesario acometer "ajustes tranquilos sobre todo en el ámbito local", "cambiando algunas caras" en sitios donde los resultados del 9-M no fueron satisfactorios. Eso sí, aseguró que la renovación será una decisión "democrática".

El líder acordó los cambios tras los comicios generales, pero aún no los acometió, pues las direcciones provinciales están estudiando el resultado electoral municipio a municipio y analizando los posibles ajustes. Pese a admitir la necesidad de profundizar en la renovación, Feijóo volvió a hacer ayer una lectura triunfal del 9-M, al recordar que el PPdeG fue el más votado y que ganó con un porcentaje de voto mayor que Zapatero.