Antón Losada cesa como mano derecha de Quintana en la Xunta presionado por el BNG

Antón Losada y Anxo Quintana, en la sala de reuniones de Vicepresidencia. / jorge leal
X. A. Taboada / Santiago
Anxo Quintana perdió ayer a su mano derecha y más estrecho colaborador en la Xunta, al secretario xeral de Vicepresidencia, Antón Losada, en quien el líder del BNG depositó su confianza para organizar el área de gobierno nacionalista y diseñar los proyectos más ambiciosos. Aunque formalmente Losada presentó su dimisión por motivos personales, que se aceptó en el Consello de ayer, su salida del Gobierno gallego fue promovida por el Bloque, receloso del influyente papel que había acumulado y de sus modos de hacer política.
Losada comenzó su andadura con Quintana poco antes de que éste asumiera la portavocía nacional del Bloque en 2003. Con el cambio en la Xunta, el líder nacionalista lo eligió como número dos de Vicepresidencia. Pero ya al poco tiempo de acceder al cargo, el ex secretario xeral dio muestras de su notoria presencia política con enfrentamientos abiertos con el área socialista. Y su salida coincide en un momento en que las tensiones del bipartito alcanzaron unas cuotas que obligaron a reunirse a Touriño y Quintana para desbloquear la situación.
Pero las fricciones también las tuvo con el Bloque. Sus modos en el cargo y sus intentos de controlar determinadas áreas de gestión de las consellerías nacionalistas, llevaron al BNG, en su asamblea del pasado año, a aprobar un documento donde se le advertía, aunque sin referencias expresas, de que no podía actuar como portavoz del Bloque, que para eso el partido ya tenía sus cargos.
Todo atado
El Bloque quería apartarlo de la Xunta y sólo la confianza de Quintana mantenía a Losada. Pero distintos dirigentes del BNG continuaron presionando para cumplir el objetivo, a lo que se sumó el incidente de Losada con la Policía Autonómica, en marzo de este año, que debilitó la relación con Quintana.
"Estaba todo cocido desde hace tiempo", comentó ayer un miembro de la ejecutiva del Bloque, en el sentido de que el partido había conseguido finalmente su propósito y que sólo se estaba a la espera del momento propicio. De hecho, en la última reunión de la ejecutiva de este lunes se habló de realizar cambios en la Xunta y de ajustar mejor la actuación institucional al ideario nacionalista, pero sin poner nombres encima de la mesa.
El portavoz del grupo parlamentario, Carlos Aymerich, confirmó ayer que el cese de Losada estaba ya "hablado", pero lo atribuyó al final de una etapa en la que consiguió poner en marcha todo el entramado de servicios sociales de Vicepresidencia.
Siendo hasta ahora su mano derecha, Quintana no quiso hablar ayer y sólo comentó, lacónicamente al terminar la reunión del Gobierno autonómico, que ha había cesado "a petición propia".
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, fue algo más explícito, pero porque tras el Consello los periodistas le formularon once preguntas al respecto. Aseguró que "formalmente" fue una petición de cese "por motivos personales", que el PSdeG-PSOE nunca pidió la cabeza de Losada, que el relevo no tiene mayor importancia y que Anxo Quintana tiene todo el margen de maniobra para escoger o cesar a sus colaboradores.
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