Accionistas de la inmobiliaria Cortegada S.A., propietaria de la isla del mismo nombre ubicada en la Ría de Arousa, sostienen que los 500.000 euros que la Xunta les ha notificado como precio de expropiación de la isla, incluida en el Parque Natural Illas Atlánticas, es muy inferior a la cantidad de compra que ellos abonaron a Don Juan de Borbón en 1978.
"Teóricamente se abonaron 100 millones de las antiguas pesetas, 60 por la isla y 40 por el chalé que iba a construirse para D. Juan. Los 600.000 euros de entonces se convierten casi 30 años después en 500.000", aducen. Claro que en 1907 la comisión del Ayuntamiento de Carril, al que pertenecía Cortegada, que decidió adquirir la isla para donársela a Alfonso XIII pagó 40.000 duros mientras las 16 familias que residían allí tenían que marcharse.
La reciente compra de isla de Sálvora por la que Caixagalicia pagó 8,4 millones de euros, es lleva señalar que ahora hay un dato objetivo para valorar su isla y cuestionar el justiprecio.
"Sálvora no ha sido adquirida por un especulador, sino por la Fundación Caixagalicia -que no tiene ánimo de lucro- con el objetivo de emplearla en patrimonio. Basta calcular el precio por hectárea de Sálvora para calcular el de Cortegada", explica un grupo de accionistas minoritarios de Cortegada S.A.
El hecho de que Sálvora siga en manos privadas pese a pertenecer al Parque Natural Illas Atlánticas, también les da una baza para mantenerla en su propiedad, si bien el grupo minoritario no tiene ganas de "guerras judiciales".
La Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia ha dado 15 días a la inmobiliaria Cortegada S.A. para que sus accionistas vendan la isla y eviten la expropiación forzosa , sin embargo no han encontrado un interlocutor válido. Y es que la inmobiliaria llevaba más de 15 años sin presentar la rendición de cuentas en el Registro de la Propiedad, por lo que en 2000 Hacienda registró la cancelación provisional de la sociedad.
El constructor compostelano José Otero Túñez convocaba vía BORME en enero de 2005 una junta general en Santiago para la modificación de estatutos, aprobación de cuentas desde 1992, nombramiento de administrador solidario, informar sobre la situación de la urbanización y del parque Illas Atlánticas y adjudicación de acciones con dividendos pasivos para desembolsar en ejecución de acuerdo de la junta general de junio de 1992. La reunión se celebró sin los accionistas minoritarios que no se enteraron de la convocatoria pese a que tienen acciones cuestionadas, pues fueron en 1992 a la ampliación de capital, hicieron la primera aportación pero aseguran que no hubo quien recogiera el resto.
Cortegada S.A. adquirió la isla para construir una gran urbanización que nunca llevó a efecto y el Supremo denegó los 15.000 millones de pesetas por daños que reclamó a la Xunta y al Concello de Vilagarcía.
