El Diccionario de la Real Academia Española era sometido el pasado miércoles a examen en el Congreso por contemplar como significado de "gallego" las acepciones "tonto" o "tartamudo". Sin embargo, el español no es el único que incluye definiciones peyorativas del término.

Basta con desplazarse unos cuantos kilómetros al sur, al vecino Portugal, y consultar por internet y sin moverse de casa el "Diccionario Universal Portugués" para hallar como significado de "galego" acepciones (en sentido figurado) tan negativas como "ordinario", "fraco" ("flaco", "débil", en español) o "de pequeno valor".

Si el término se aplica en Lisboa, además tiene el significado de "moço de fretes" (recadero). Asimismo, en este mismo vocabulario se reconoce a "galegada" como sinónimo de "grosería".

En otro vocabulario luso, el "Houaiss", que sólo se puede consultar en papel, la palabra "galego", como sustantivo masculino, adquiere también tintes despectivos al referirse a un individuo nacido en Portugal de muy bajo nivel de cultura, así como a alguien rudo o grosero. En este caso, "galegada" se define como "acto impensado" que se vincula también a ignorancia y estupidez.

La controversia sobre las definiciones de la palabra "gallego" se destapó cuando el BNG mostró su indignación por las acepciones peyorativas contenidas en el Diccionario de la RAE. No obstante, el Parlamento español se limitó a pedir a la Real Academia que "estudie la pertinencia" de incluir estas acepciones en el diccionario, que aparecen incluso antes de que se mencione que "gallego" es también "la lengua de Galicia".