Un hombre de 65 años fue detenido el martes por la Guardia Civil por un supuesto delito de incendio forestal por imprudencia grave al no adoptar las medidas de seguridad preceptivas en una quema agrícola.

El fuego controlado y avivado por el viento de la zona devastó una superficie aproximada de dos mil metros cuadrados que afectaron a monte raso y a una plantación de pino de unos 20 años de antigüedad. El imputado quedó en libertad tras prestar declaración en el Juzgado de Guardia de Ribeira.

En total la Guardia Civil ha detenido en lo que va de año unas diez personas por delitos forestales, seis de estos arrestos han sido en A Coruña, dos en Pontevedra y otras dos en la provincia de Ourense.