X. A. Taboada / santiago

El plan puesto en marcha este año por el Gobierno para frenar la venta de drogas a pequeña escala -conocido también como menudeo- y su consumo en las inmediaciones de los centros escolares se ha cerrado en Galicia con la detención de cinco personas y la presentación de denuncias contra otras 195, bien por fumar hachís en espacios públicos o por tener una dosis mínima encima destinada al consumo privado.

La campaña se desarrolló en tres fases y, según informó la Delegación del Gobierno en Galicia, se apreció cómo en cada una iba descendiendo progresivamente el menudeo. El último control se practicó entre los días 15 y 31 de mayo, coincidiendo con el final del curso escolar.

El resultado global ha sido la detención de cinco personas por traficar con drogas cerca de los colegios e institutos y otras 195 denunciadas. La Delegación del Gobierno en Galicia no pudo facilitar la distribución por provincias, pero sí aseguró que cuatro detenciones fueron practicadas por la Policía Nacional, por lo que éstas se produjeron en centros docentes de carácter urbano, mientras que una la hizo la Guardia Civil, a quien le correspondió llevar la vigilancia en los colegios de ámbito rural.

En cuanto a las denuncias, la Policía Nacional presentó 189 y la Guardia Civil, sólo seis.

En el conjunto de España, puesto que esta campaña se realizó en todo el Estado, las Fuerzas de Seguridad detuvieron a 62 personas, formularon denuncias contra otras 2.872 y se realizaron 3.013 decomisos de droga, principalmente hachís.

Las comunidades donde se constató una mayor actividad del menudeo fueron Canarias, autonomía en la que se produjeron 20 detenciones (el 32,2% del total); Cataluña, con nueve detenidos (el 14,5%); y Valencia, con 8 apresados (el 12,9%).

En cuanto a las denuncias, Andalucía ocupa el primer lugar, con 503, seguida de Cataluña (368), Valencia (318), Madrid (288), Cantabria (287), Galicia (195) o Aragón (149).

El Gobierno decidió poner en marcha este plan de vigilancia de los contornos escolares, que al menos tendrá continuidad durante los dos próximos años, debido a que cada vez disminuye la edad de inicio en el consumo de drogas, básicamente hachís, hasta situarse ahora en los 14 ó 15 años.

En la vigilancia de los centros escolares participaron agentes uniformados, como elementos disuasorios, pero también otros de paisano, con el objeto de coger in fraganti a los pequeños camellos que buscan clientela en las inmediaciones de los colegios o a los que consumen drogas en la vía pública.