En el inmueble en el que los bomberos encontraron los dos cuerpos cuando acudieron a sofocar un incendio había signos de que se había celebrado una fiesta. Vecinos del edificio confirmaron que primero había música alta y a altas horas de la madrugada se escucharon golpes y, posteriormente, nuevamente música.

La juez titular del juzgado de instrucción número 5 de Vigo ha decretado el secreto de sumario, mientras que los cadáveres de las víctimas permanecen en el Hospital Nicolás Peña de Vigo, donde se les practicaron pruebas de ADN para confirmar las identidades debido al estado en el que quedaron los cuerpos a consecuencia del incendio.

Según explicaron fuentes hospitalarias, las autopsias aún no han finalizado y, en cualquier caso, la actividad no se suspenderá con la llegada del fin de semana hasta que las pruebas forenses no se finalicen. Los cuerpos sin vida del joven brasileño Julio A.L, de 32 años de edad, y del español Isaac P.T., de 24 años, estaban maniatados y presentaban cortes de arma blanca en diversas partes del cuerpo.