Galicia se encuentra en situación de riesgo "extremo" de incendios, según el aviso lanzado ayer desde el Gobierno central. La prolongada sequía que atraviesa la comunidad autónoma sumada a las altas temperaturas previstas este fin de semana ha disparado el peligro de que se produzcan fuegos forestales en los montes gallegos. La prueba es que sólo en el día de ayer se registraron al menos veintidós incendios, los más importantes en la provincia de Ourense: uno en Laza, que fue controlado a mediodía, y el otro en A Bola, donde las llamas llegaron a ro- dear varias viviendas. Fue la jornada más negra en lo que va de verano.

El Gobierno central ha dado orden al Ministerio de Defensa para que el Ejército esté preparado para intervenir tan pronto como se produzca un incendio importante en alguna de las comunidades autónomas que están bajo alerta. Además de en Galicia, el riesgo también es "extremo" en el occidente andaluz, Baleares y el litoral de Gerona. Así lo determinó ayer la Comisión Interministerial para la Prevención de Incendios que se reunió por tercera vez desde que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero decidió endurecer la lucha contra el fuego tras la catástrofe de Guadalajara.

Durante los próximos días el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil dará prioridad en su actuación a la prevención de incendios. Además, el Ministerio de Medio Ambiente ha incorporado siete nuevas aeronaves para la extinción de fuegos, de manera que ya dispone de un total de 69 avionetas.

Estos medios se desplegarán en las comunidades que se encuentran en situación de alerta cuando el incendio sobrepase la capacidad de trabajo de los servicios autonómicos de extinción.

En Galicia el dispositivo anti-incendios trabajó ayer a pleno rendimiento en una de las jornadas más duras del verano. Uno de los fuegos más importantes fue el de A Bola (Ourense), donde las llamas rodearon varias viviendas. Uno de los integrantes de la brigada que participaba en la extinción de este incendio resultó intoxicado por la inhalación de humo y fue trasladado al Hospital de Ourense donde fue sometido a un examen médico.

Este fuego, que a última hora de ayer estaba ya controlado, se originó en el mismo lugar en el que ardió el pasado jueves y por cuya autoría ha sido imputado un vecino de 44 años, acusado de un delito de incendio forestal por imprudencia al reparar una máquina empacadora en una finca. A este caso hay que sumar la detención de otra persona por un fuego registrado en A Merca.

Ourense fue la provincia más afectada por los incendios de ayer. Además de en A Bola y A Merca, ardió también en Monterrei, Melón, Maside, Chandrexa de Queixa, Laza y Velle. Todos estos fuegos fueron controlados a lo largo del día, salvo un foco registrado en Allariz donde a última hora los efectivos de lucha contra incendios todavía trabajaban para apagarlo.

En A Coruña, por la mañana se registró un incendio en Ames, pero a medida que avanzaba el día aparecieron nuevos fuegos en Santa Comba, Brión, Ortigueira, Arteixo y Bergondo, que quedaron bajo control al finalizar la jornada.

Las localidades lucenses de Navia, Saviñao, Fonsagrada y Palas de Rei también sufrieron incendios a lo largo del día. A última hora, sin embargo, sólo el fuego de Palas de Rei mantenía en alerta a los servicios de extinción.

En Pontevedra sólo fue víctima de las llamas la localidad de Ponteareas, aunque al atardecer se registró otra alarma por incendio en Cotobade.