El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
Risas y anécdotas en la comida anual de «A Morriña de Pescanova»
Pablo H. Gamarra
El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.
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Pablo H. Gamarra
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Pablo H. Gamarra
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El grupo «A Morriña de Pescanova» volvió a reunirse ayer en el Náutico para comer como hacen todos los años desde 2006. Cerca de un centenar de jubilados de la compañía asistieron a este nuevo encuentro cargado de risas y anécdotas. En esta ocasión se echó de menos por estar convaleciente a Gregorio Baudot, unas de las personas que más ha contribuido a la difusión de las citas de este veterano grupo.