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Marta G. Brea
Ver galería >El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
Marta G. Brea
El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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El oso pardo ibérico llamado "Carmo", nacido accidentalmente en cautividad en enero de 2005 en el zoo de Carmona, sigue siendo la estrella del antiguo Vigozoo en A Madroa, reconvertido ahora en Vigo Nature, que lo adoptó en 2006 junto a su hermano Pelayo, fallecido en abril de 2018 tras una larga enfermedad. Ambos al tener la impronta desde el nacimiento, fue imposible su introducción en la Naturaleza. Sus padres fueron rescatados de crías en Picos de Europa y Pirineos tras quedarse huérfanos por el furtivismo. Su vida en A Madroa es sencilla, pero no por ello desprovista de emociones.
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