El 25 aniversario de su muerte devuelve al genial pintor gallego al primer plano de la actualidad
O manancial da vida
Mural al temple
Una de las pocas obras en las que se aprecia un interés por la pintura mediterránea, una fantasía en la que el artista celebra la vida con una narración onírica, en homenaje a Tiziano. Fue pintado justo después de la Guerra Civil, cuando Laxeiro vivía en la ciudad de Pontevedra
Mi primera acuarela. 1930
Acuarela sobre papel
Posiblemente no sea su primer autorretrato, pero es el más antiguo de los catalogados por la Fundación Laxeiro. “Tiene un aire modernista muy tierno”, dice de él Javier Pérez Buján. Llama la atención la firma: Yo, Laxeiro, y unas palabras debajo que están borradas.
Monecos no olvido
Óleo sobre lienzo
Pintada años después de su regreso a España, la también titulada Os Inmortais pertenece a una serie de obras de “personaxes aforcados” en los que recupera el tenebrismo cromático.
Carnavalada 1931
Óleo sobre cartón
Pintado cuando Laxeiro tenía 23 años de edad, está considerado uno delos primeros cuadros expresionistas del arte gallego. El artista recoge una escena popular nada complaciente, con claras influencias del Goya de las pinturas negras, del tenebrismo de Gutiérrez Solana y la figuración europea del período de entreguerras.
Autorretrato. 1952
Óleo sobre lienzo
Esta obra marca una frontera en su rayectoria. Empezó a pintarlo en Vigo y lo terminó en Buenos Aires. En este autorretrato, la figuración va dejando paso a la abstracción. Laxeiro se enmarca ya totalmente en la pintura informalista.
A cidade sumerxida. 1964
Óleo sobre lienzo
En este lienzo, realizado en un período de experimentación, se aprecia su interés por la abstracción geométrica argentina y la pintura del urguayo Torres-García.
Panxoliña. 1978
Óleo sobre lienzo
Mural en bajorrelieve en el que despliega su mundo fabulador, utilizando una figuración expresionista, dispuesta en viñetas, que anuncia las influencias de autores geométricos.
Triloxía. 1995
Calcografías
Esta es una muestra de su trabajo con técnicas grabado y, a la vez, uno de sus últimos acercamientos a ellas, esta vez utilizando la técnica calcográfica para realizar tres estampas abstractas de gran colorismo que ilustran su actitud vitalista apenas un año antes de su muerte.
Triloxía. 1995
Calcografías
Esta es una muestra de su trabajo con técnicas grabado y, a la vez, uno de sus últimos acercamientos a ellas, esta vez utilizando la técnica calcográfica para realizar tres estampas abstractas de gran colorismo que ilustran su actitud vitalista apenas un año antes de su muerte.
Triloxía. 1995
Calcografías
Esta es una muestra de su trabajo con técnicas grabado y, a la vez, uno de sus últimos acercamientos a ellas, esta vez utilizando la técnica calcográfica para realizar tres estampas abstractas de gran colorismo que ilustran su actitud vitalista apenas un año antes de su muerte.
Sen título. 1989
Vidriera
Con estas vidrieras del Parlamento de Galicia, cierra un círculo de 64 años, al trasladar esa iconografía al vidrio, en una imagen decorativa que recoge la faceta no figurativa de los últimos años.
Mural al temple
Una de las pocas obras en las que se aprecia un interés por la pintura mediterránea, una fantasía en la que el artista celebra la vida con una narración onírica, en homenaje a Tiziano. Fue pintado justo después de la Guerra Civil, cuando Laxeiro vivía en la ciudad de Pontevedra