No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Tapices tradicionales en las principales calles de Gondomar
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
El retrato de Bowie
Verbos de Acción
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
La procesión baja la escalinata alfombrada de San Benito
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
La procesión baja la escalinata alfombrada de San Benito
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
Los más de mil alfombristas de Gondomar desplegaron imaginación
con diseños tan curiosos como un retrato de David Bowie
Pablo Hernández Gamarra
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños
No solo brillaron este año las alfombras florales de Gondomar por su colorido y laboriosidad habitual, o por el récord de participación —con más de mil voluntarios en la calle durante buena parte de la madrugada—, sino sobre todo por la singularidad de sus diseños