El colegio Apóstol Santiago- Jesuitas Vigo estrena este curso un nuevo espacio para potenciar el desarrollo del esquema corporal del alumnado más pequeño y, a la vez, “una magnífica y moderna herramienta en la que se conjuga la estimulación y la relajación”.

En la nueva Aula de Estimulación Multisensorial (EMS), con elementos como la música, las luces de colores, los aromas, las texturas... los niños y las niñas exploran, descubren y disfrutan del mundo de los sentidos y los afectos.

En los países del Norte de Europa ya hace muchos años que estas aulas están integradas en los colegios, pero en España es algo aún novedoso. Este centro educativo de Vigo indica que ha a apostado por ello porque creen firmemente en el beneficio que supondrá para el desarrollo integral del alumnado. En esta Aula de Estimulación Multisensorial (EMS) se llevan a cabo distintas actividades que están recogidas e integradas en la programación del centro, tales como: 

  • Estimulación, contacto somático, para que el niño tome conciencia de su cuerpo para desarrollar su esquema corporal y coordinar sus movimientos. 
  • Actividades de estimulación táctil, es estimulación vibratoria, a partir de elementos concretos, para que vaya adquiriendo los límites de su cuerpo. 
  • También actividades de estimulación vestibular: el movimiento se localiza en la parte no auditiva del oído. Constituye la condición previa para cualquier desplazamiento y es positivo su estimulación, expresan desde el cole.
  • Estimulación del olfato y estimulación acústica: hay niños que están sobresaturados a nivel acústico y esto puede repercutir en problemas de conducta y sociales. Y actividades de estimulación visual que ayudan a motivarlos, a centrar su atención. En definitiva, distintas actividades que ayudan a trabajar el esquema corporal, la motricidad fina más precisa, el lenguaje, a crear rutinas interactivas para favorecer la comunicación, para favorecer el juego con sus iguales, etc.

¿Cómo crear un espacio así? ¿Qué características o materiales hay en este espacio?

Un rincón con objetos de colores llamativos, fibras luminosas, bolas luminosas, columnas de burbujas o luces de colores. En cuanto al oído, se buscan objetos que emitan sonido: cajas o instrumentos musicales (panderetas, tambores, huevos sonoros, cascabeles…).

¿Y para el olfato? Ambientadores de tela, aceites esenciales, difusores de aromas...Esponjas, plumas, globos o cuerdas para aprender a través del tacto.

¿Y el gusto? Estimulando el paladar de los más pequeños: de dulce a salado y agrio para experimentar e identificar cada sensación.

Jugando con luz.