La posibilidad de compartir material escolar y objetos, como balones o cuerdas de juegos, entre el alumnado es la principal novedad del Protocolo de Adaptación al contexto del COVID-19 que presentó la Xunta de Galicia para el curso 2021-22, en el que se mantendrá la actividad lectiva presencial en todas las etapas educativas como ya sucedió en este último curso.

Un documento que avanza en nuevas medidas de transición para garantizar la seguridad sanitaria y el proceso académico, en un curso en el que los niños y niñas de Infantil, Primaria y Educación Especial seguirán organizados en grupos de convivencia estable, tanto en el aula como en el recreo y comedor.

El Gobierno gallego, no obstante, adelanta que en caso de lograr "una situación de baja transmisión", pues estos grupos 'burbuja' podrán interaccionar con otros del mismo curso.

Para el resto de las etapas educativas, la distancia general en el aula será de 1,2 metros, y el uso de la mascarilla continuará siendo "obligatorio" en todo el centro para los mayores de seis años, y "recomendable" para los menores de esa edad.

Este protocolo ha sido ratificado por el Comité Clínico y está adaptado a lo establecido en la Declaración de Acciones Coordinadas de los Ministerios de Sanidad y Educación del Gobierno de España.

"Será la situación epidemiológica la que nos marque el camino a seguir", declaró en una rueda de prensa en la Ciudad de la Cultura el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, quien recordó que se trata de un protocolo "de transición" elaborado en este momento por lo que estará "en continua revisión" en función de la crisis provocada por el coronavirus.

El responsable de Sanidad, Julio García Comesaña, agradeció a la comunidad educativa su implicación en la lucha contra el coronavirus y expresó su deseo de que los escolares estén vacunados pronto, "para lo que hace falta que lleguen las vacunas".