Gerard Moreno fue la gran novedad en el equipo de Luis Enrique ante Polonia. Después de una semana de intenso debate sobre la delantera, Luis Enrique le situó en la banda derecha en una posición algo extraña para él, pero donde trató de generar desequilibrio a base de centros y de diagonales. En una de ellas un disparo suyo acabó en el gol de Morata.

Su gran momento llegó en el segundo tiempo cuando fue objeto de penalti tras un grosero pisotón. El mismo se encargó del lanzamiento y estrelló el balón en el palo derecho de la portería de Polonia. No fallaba un penalti desde hace más de año y medio. Llevaba catorce marcados de forma consecutiva y es uno de los grandes especialistas de la Liga.