Fiestas eróticas I

Se acercan las fiestas navideñas, una época del año llena de emociones que se interpreta de forma muy diferente según la situación personal que estés viviendo, pero hasta para quienes no lo celebran abiertamente es imposible ser indiferente a las mismas, ya que a veces, los adornos y las luces led (por supuesto) nos recuerdan que algo está pasando, que son días de reencuentros, de fiesta y de excesos. Así que aprovecharemos este espacio haciéndoos algunas propuestas para erotizar vuestras navidades.

Erotizar: verbo transitivo

De esta definición obtenemos dos ideas: la primera es que casi cualquier cosa se puede erotizar y la segunda es que el erotismo tiene un punto de comunicación y social.

Lo que está claro es que, para comenzar este camino, tenemos que erotizar y dar contenido fantasioso a nuestros pensamientos, así que el cerebro (como casi siempre) tiene la clave: a más pensamientos eróticos positivos, mejor respuesta sexual.

Como ya os he comentado algunas veces, tenemos la falsa creencia de que el sexo bueno y pasional surge de forma espontánea, improvisada y mágicamente; nada más lejos de la realidad. En el inicio de una relación es posible que eso pase, ya que existen la novedad y el descubrimiento, pero cuando pasa el tiempo esos neurotransmisores que provocan el deseo con pase gratuito se van disipando, por lo que tenemos que reforzar nuestro pensamiento erótico.

El pensamiento erótico es creativo y divergente; demuestra y apoya una forma ingeniosa de usar tu mente. El ejercicio más sencillo es intentar convertir en erótico y pasional cualquier objeto que en principio no tenga un uso erótico: erotizar un vibrador es fácil, pero hacerlo con un árbol o con un cuaderno es más complejo.

Os propongo un primer juego para jugar en pareja estas navidades:

Compra o decora una caja erótica navideña e introduce en ella diversos objetos y alimentos. Una propuesta de caja erótica sería:

Prepara tu caja erótica con esmero: puedes añadirle todos los objetos que desees y, sobre todo, emplear la imaginación. Para usarla tenéis que escoger un día especial en el que podéis tener toda la tranquilidad del mundo y podáis dedicaros unas horas a disfrutar. Os sugiero empezar tapándoos los ojos con el pañuelo o corbata y dejaros llevar por los sentidos ofreciendo al olfato la canela, vainilla, clavo o similares; a continuación, poner en la boca de tu pareja el bombón y de esa manera ejercitar el gusto. Sería divertido incluir en uno de los cheques Vale por un masaje erótico y poder canjearlo al momento con el aceite destinado a cubrir de relax y erotismo el cuerpo de tu amante. También se puede jugar con los globos, explotarlos entre vuestros cuerpos tal y como vuestra imaginación permita para que la adrenalina fluya entre el juego, los nervios y las risas. Podéis imaginar un pasaje de ese libro erótico o leerlo en un ambiente iluminado por velas. Jugar con los dados eróticos y marcar los tiempos con el reloj de arena. Hablar de vuestros deseos y fantasías y, a través del objeto personal elegido, recordar aquel día o noche donde lo pasasteis tan tan bien. Explorar el cuerpo de tu pareja con música estimulante y la pluma por todos los recovecos de su cuerpo.

Estas son solo algunas ideas, pero con esos elementos podéis jugar a inventar nuevos retos y fantasías, lo cual será la clave para seguir erotizando vuestra mente. Si, después de jugar con esta caja, esa noche no es nochebuena...

Seguimos ofreciendo ideas eróticas en nuestra próxima entrega. Mientras tanto, podéis escribirnos y contactarnos en www.saludplacer.com.

¡Felices y eróticas fiestas, placeres!

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