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“Crebas”, objetos que van del mar a la playa

Manuel Sendón, en el Museo do Mar, ante dos de sus obras F. F.

Los restos del naufragio / quedaron esparcidos, / o desaparecidos, o rotos”, oigo cantar a Bunbury mientras rememoro la visita que hice con Manuel Sendón a “Crebas”, su exposición en el Museo del Mar de Vigo. Advierto antes de nada que nuestro artista está por dos almas poseído: la urbana en Vigo y otra que anida o revolotea por la ría de Corcubión. Y allí tenéis, en 30 fotografías de gran formato y un políptico de 70 imágenes de pequeñas dimensiones, un espacio que huele a mar poblado de esos objetos inesperados que éste vomita a las playas de aquellas peligrosas costas pero con las que Sendón no quiere describir nada sino sugerirlo todo.

La Costa da Morte que tanto ama, su playa de O Rostro que tan bien conoce y la dureza del mar en esa zona que arroja sobre ella sus “crebas”, que así les llaman los que andan en su búsqueda por las orillas. Son muchas las historias fascinantes de objetos traídos por el mar que escuchó este profesor de Fotografía de la Facultad de Bellas Artes de Vigo, unas simpáticas y otras trágicas. El mar cubierto de naranjas hasta cambiar de color, marineros que cogieron en sus redes botellas de champán francés o restos de barcos como el “Silva Goubeia”, hundido en 1927 y que de vez en cuando sobresale de su tumba bajo las aguas del hermoso arenal de O Rostro, esa maravilla salvaje de la Costa da Morte, una oda al mar, al salitre y al aire puro .

Y es que la muestra evoca, aunque no solo, la suerte del naufragio. E1 mar ha proporcionado a lo largo de la historia de los hombres gran cantidad de circunstancias sobre las que pensar, hablar o fraguar obras de arte. El navegante, derrotado por la violencia del mar y de los elementos recrea la literatura (desde el “Náufrago salvado” de Gonzalo de Berceo al “Robinson Crusoe” de Defoe), el cine (desde “Náufragos” de Hitchcok a "La deriva” de Shailene Woodley ), la pintura (desde Goya a las maravillosas tempestades de Turner), la poesía (“Como el mar de la playa a las arenas, voy en este naufragio de vaivenes”, escribe Miguel Hernández)... a los que en el presente se ha sumado la fotografía con toda su fuerza testimonial y descriptiva.

Pero en esta exposición cuya entrada preside la imagen de una colorista batea “Rumbo á Illa da Creba”, este profesor no pretende describir sino sugerir, que el visitante deje volar su imaginación con cada objeto que, descontextualizado, ve en una u otra de esas fotos de gran formato, porque lo que Sendón pretende es un intento por acercarse, lo dice él, “ao potente imaxinario do mar que existe na Costa da Morte”. Una silla de mimbre con ojos laterales que te sugiere una ventana al mar de bífida mirada, una paca de algodón que te transporta a las olas espumosas de un tsunami... Ya te avisa un vídeo justo cuando entras, realizado por su hija Olaia: “A mirada dun poeta non é a do crebeiro”.

Manuel Sendón poetiza con fotos os agasallados do mar na mostra "Crebas"

Manuel Sendón poetiza con fotos os agasallados do mar na mostra "Crebas" Alba Villar

Profesor de Matemáticas en sus comienzos docentes, pasado a la de las Bellas Artes con la fotografía después, fundador con Suárez Canal del Centro de Estudios Fotográficos con sede en Vigo, impulsores ambos de una editorial sobre estas materias que recuperó una memoria de Galicia y organizadores de las inolvidables Fotobienales de Fotografía que trajeron a Vigo lo mejor de sus representantes mundiales. Su faceta como artista se manifiesta una vez más en esta exposición, “Crebas”, una serie fotográfica realizada entre 2007 y 2020 en un arenal de su amada Costa da Morte, la playa de O Rostro.

Retratos de redes, restos y hierros hallados en la arenas que complementan la sección que el Museo do Mar dedica a la historia de los naufragios en Galicia, aportando una mirada más subjetiva. El ojo Sendón.

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