Un referente mundial en investigación y un Jardín Botánico único en Europa. El Centro de Investigaciones Forestales de Lourizán, que cumple 75 años, puede presumir de una trayectoria que le sitúa en la vanguardia de los estudios sobre especies arbóreas. Es también pionero en análisis de prevención de incendios forestales y cuenta con uno de los mayores "túneles del fuego" del mundo.
Creado en 1943 como Centro Regional de Enseñanza de Investigaciones y Experiencias Forestales, se ubica en una finca de 52 hectáreas situada en la parroquia pontevedresa de Lourizán, que había sido propiedad del político Eugenio Montero Ríos. En 1984 fue transferido a la Xunta de Galicia y depende de la Consellería do Medio Rural. "El centro nació con una doble filosofía: investigar y enseñar sobre ciencias forestales y disponer de un lugar en el Noroeste de la península para ampliar esos dos campos". Así resume su director, Enrique Martínez Chamorro, la labor que viene desarrollando el centro desde su creación hace ahora 75 años.
Con unos 50 trabajadores entre funcionarios, investigadores y becarios, sus principales líneas de investigación se centran en la genética forestal y silvicultura, la defensa del monte y los ecosistemas forestales. El centro de Lourizán fue pionero en nuestro país en el desarrollo y puesta en práctica de numerosos productos y tecnologías forestales. Así, en los años 50 impulsó la mejora genética del pino bravo ( P. pinaster), la creación de pastos de labranza mínima y la mejora genética de especies pratenses. En la década siguiente desarrolló fertilizantes forestales en pastilla. También destacan entre sus aportaciones la identificación de nuevas especies y variedades botánicas, la introducción de especies forestales con base científica o la obtención de clones de castaño resistentes a enfermedades. Todo ello sin olvidar la identificación de nuevas enfermedades y plagas forestales y sus tratamientos o el impulso al sector micológico.
Por otra parte, el Centro de Investigaciones Forestales de Lourizán ha desarrollado modelos de predicción de comportamiento del fuego y mejoras silvícolas para la regeneración de montes quemados.
Jardín botánico
Con 900 especies distintas, de las que 700 son árboles, el Jardín Botánico de Lourizán es uno de los mejores de Europa. De hecho es el que cuenta con un mayor número de especies arbóreas. Creado en 1949 bajo el nombre de "Arboreto", el jardín tiene la mejor colección de especies coníferas de la península ibérica, unas 180. En las 52 hectáreas de terreno de la finca se encuentran varios ejemplares que baten récords mundiales en altura: hay cuatro eucaliptos y una angophora floribunda de 34 metros y un camelio japónico de más de 20 metros y 130 años de antigüedad. Entre los ejemplares singulares del Jardín Botánico destacan una sequoia serpenvirens, una cryptomeria japonica, una metasequoia glyptostroboides, una corylus avellana y un cedro del Líbano de 130 años.
En 1993 se creó el Parque de las Autonomías, con las especies arbóreas más características de cada comunidad autónoma española. Miles de personas -sobre todo escolares- acuden cada año a la finca de Lourizán para contemplar sus tesoros arbóreos. Una reserva forestal que garantiza también la supervivencia de especies en peligro de extinción.
