En el centro histórico de Oporto, en Miragaia, World of Discoveries reconstruye de forma amena y real la fantástica odisea de los navegantes portugueses. Aquí es posible vivir a bordo de una nao de la Ruta de Indias e incluso cruzar océanos.

Oporto es el punto de partida, cuna de Enrique el Navegante. La ruta sigue hacia el sur hasta llegar a Lisboa y continuar a Ceuta. Más adelante está el famoso Cabo de las Tormentas, hogar del monstruo Adamastor. Esto supone adentrarse en un mar tenebroso acompañado de una tempestad gigantesca.

Las olas y la tormenta se experimentan en el túnel inmersivo de nueve metros del museo, que representa uno de los momentos más emocionantes e inolvidables de las Navegaciones portuguesas.

La tecnología más moderna se utiliza en este parque temático para que todo sea real navegando en la nao. Desde una proyección de Enrique el Navegante hasta los globos 4D que permiten explorar la cartografía de la época. El propio Infante da la bienvenida a los visitantes, que a través de pantallas táctiles conocen toda la información sobre los navíos e instrumentos utilizados en aquellos tiempos, pioneros entonces.

Odisea por los océanos

La aventura en este museo es tan fascinante como nítida y real

Enrique el Navegante propone descubrir “coisas maravilhosas nunca antes vistas” y no defrauda. Todo en World of Discoveries está hecho a escala real. La sensación es tan nítida que el público vive un auténtico viaje en el tiempo. La experiencia interactiva guarda sorpresas como la sala Mundos al Mundo, que enseña cómo se fue conociendo el planeta entre 1321 y 1800. También se puede conocer el famoso rinoceronte traído por los portugueses y que Manuel I de Portugal ofreció al Papa.