El pasad junio, la OMS alertó de que el abuso a los ancianos estaba aumentando en todo el mundo, hasta el punto de que uno de cada seis lo sufre.

En España, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) ha publicado una guía para el buen trato de nuestros mayores, cuyo objetivo no es que reciban un trato diferente por razón de edad, sino que la sociedad sea sensible a que, en el proceso de envejecer, la persona debe adaptarse a su propia historia, a la evolución familiar, social, cultural y tecnológica, “que no es tarea fácil”.

Las pautas de cómo quieren ser tratados son sencillas:

-Con respeto.

-No ser tratados como niños, aunque presenten condiciones de enfermedad, dependencia o discapacidad.

-Con afecto, comprensión y ser tenidos en cuenta, para que puedan poner en práctica todos los conocimientos, competencias y condiciones propias de relación interpersonal.