El delantero de la selección francesa y atacante del Real Madrid Karim Benzema aseguró que Francia puede "dar la sorpresa" contra España en el cruce de cuartos de final de la Eurocopa.

"Es uno de los mejores equipos del mundo, pero no es invencible. Podemos dar la sorpresa contra España", declaró Benzema en una entrevista publicada hoy en "Le Parisien".

Según el análisis del atacante, que aún no se ha estrenado como goleador en la competición, será un partido en el que "habrá espacios" porque España no tiene "miedo de jugar ni de tocar desde atrás".

"Ellos también tienen fallos. Queremos hacer algo, pero habrá que elevar nuestro nivel de juego. Será una guerra y hay que ganar para esperar algo", señaló el ariete de Francia, quien reconoció que los "bleus" cuajaron un mal partido contra Suecia, que se saldó con un 2-0 para los escandinavos, eliminados de antemano.

Raymond Domenech le alejó del Mundial de Sudáfrica porque no estaba en forma. En 2008, en la Eurocopa de Austria y Suiza, Karim Benzema jugó dos partidos y su equipo no pasó de la fase de grupos. El delantero francés nunca ha tenido la ocasión de participar en una eliminatoria de una gran competición internacional de selecciones. España le abre esa puerta en cuartos.

El jugador del Real Madrid jamás había alcanzado en un Mundial o en una Eurocopa una ronda que fuese más allá de la de grupos. Las decisiones técnicas o la coincidencia con una crisis de juego e identidad de Francia, alejaron a Karim de una fase tan avanzada en un torneo de alto nivel.

Su anterior oportunidad, en Sudáfrica, fue cortada de raíz por el técnico Raymond Domenech. Un día antes de que anunciara una convocatoria de 30 jugadores para la cita que ganó España hace dos años, Benzema hablaba sobre su campaña en el conjunto blanco. Era la primera y sus números no fueron destacables (ocho goles en 27 encuentros)

Benzema se quedó fuera. A lo mejor, lo agradeció. Francia hizo mucho ruido en Sudáfrica, pero no futbolístico. Todo fueron escándalos, malos resultados y desplantes de los futbolistas hacia un entrenador en el que casi nadie creía.

La excusa, la falta de juventud (tenía 22 años) y otras razones, como que no había jugado lo suficiente en el Real Madrid, no parecían sostenerse. A ese Mundial fue Lass Diarra, un suplente habitual con los blancos. Tampoco fue Nasri, que había cuajado una excelente temporada en el Arsenal. Tal vez, los restos de la vieja guardia "blue" dejaron fuera a los más jóvenes.

Pero Benzema tuvo otra oportunidad de alcanzar una eliminatoria decisiva a un partido. Fue en 2008, donde participó con Francia en la Eurocopa de Austria y Suiza. Entonces tenía 19 años y Domenech sí que llamó a un hombre al que dos años después dejó fuera por su falta de experiencia.

Francia ya no era aquella que alcanzó la final del Mundial 2006 en Alemania. Empezaba su crisis y Benzema se vio inmersa en ella. A las primeras de cambio, tras una fase de grupos desastrosa (un empate con Rumanía sin goles y dos derrotas ante Italia y Holanda) los franceses abandonaron la Eurocopa por la puerta de atrás. Y Benzema se quedó sin su eliminatoria.

En aquel campeonato participó en dos encuentros y no marcó ningún gol. Es su otra asignatura pendiente. Todavía no ha hecho un tanto en una fase final. En Polonia y Ucrania, ha jugado en los tres partidos completando un total 256 minutos. De momento, no ha visto portería. Eso sí, ha dado dos asistencias de gol.

Su seleccionador ya no es Raymond Domenech, con quien tantos problemas tuvo en el pasado. Ahora es Laurent Blanc, que confía ciegamente en su delantero: "Será uno de los jugadores clave del equipo", dijo en su presentación.