P Perfil del inversor

La psicología del inversor. Los perfiles

Jordi Cuenca

Existen cinco pautas de conducta que toda persona que opera en los mercados puede estar replicando sin darse cuenta

La bolsa es un juego de suma cero. En consecuencia, cuando alguien gana tiene que haber por otro lado un perdedor. Como en el póker. También como en este juego de cartas, la psicología cuenta. Por ejemplo, un inversor con perfil de riesgo «tiene una mayor capacidad de aguante ante la volatilidad que el conservador», así que este último debe evitar a toda costa, en momentos puntuales de altas rentabilidades, cambiar su perfil a uno más osado para ganar más dinero. Si lo hace, cuando se produzcan caídas, se dejará gobernar por el miedo, sobre todo si ha cometido el grave error de apostar con ingresos que necesita; venderá cuando no toque y acabará perdiendo parte de su inversión para gozo de quienes tienen los nervios más templados, según Óscar Esteban Navarro, director de ventas de la gestora de fondos de inversión Fidelity International.

Este experto apunta cinco «sesgos conductuales» a tener en cuenta a la hora de invertir:

1. Búsqueda de atajos

Regirse por rentabilidades pasadas de un título sin analizar mucho más.

2. Efecto Ikea

El mueble de esa cadena que uno se ha construido con sus manos es el último que venderá y sucede lo mismo, aunque no sea conveniente, con las primeras acciones compradas.

3. Familiaridad

Nos quedamos con la renta fija española y no vemos otras opciones más rentables.

4. Confirmación

Buscamos datos que confirmen lo que queremos.

5. Seguir al rebaño

Hacer lo que todo el mundo hace; las grandes burbujas se han generado así.

A partir de aquí, el inversor debería tener en cuenta algunas variables para conducirse mejor en tiempos de volatilidad: saber que esta última es normal en la inversión a largo plazo y que en períodos prolongados el riesgo bursátil suele obtener recompensas; que las correcciones de mercado pueden crear oportunidades atractivas; que hay que diversificar; que hay que reinvertir los rendimientos para lograr más rentabilidad o que no hay que dejarse arrastrar por el tono general del mercado.

psicología

1. CONSERVADOR SIN RIESGO

Huye de riesgos que puedan hacer peligrar incluso ínfimamente su dinero.

2. CONSERVADOR CON RIESGO

Es un inversor dispuesto a correr algo de riesgo para obtener una rentabilidad algo más elevada. El 70 % de su cartera está en renta fija.

3. MODERADO

Asume más riesgos que el conservador y tiene entre el 50 % y el 75 % de su cartera invertida en renta variable.

4. ARRIESGADO MODERADO

La ponderación de su cartera estaría en torno a un 75%-85% de renta variable con un horizonte de inversión situado sobre todo en el corto plazo.

5. ARRIESGADO KAMIKAZE

Juega a muy corto plazo y 100 % renta variable. Está dispuesto a correr riesgos considerables a cambio de conseguir rentabilidades de entre el 20% y el 40% anual.