Entrevista

Margalida Bover, pareja de Salvador Puig Antich, tras la anulación de su condena: "Siento pena y liberación"

La mallorquina, que fue pareja del anarquista ejecutado por el franquismo, celebra la decisión "aunque sea 50 años después"

Margalida Bover.

Margalida Bover. / / Manu Mielniezuk

Jaume Bauzà | Biel Capó

Triste, pero liberada. Con esta mezcla de sentimientos encajó ayer Margalida Bover la noticia de que el Gobierno ha declarado nula, 50 años después, la condena a muerte a Salvador Puig Antich ordenada por un tribunal franquistaLa mallorquina, que fue pareja del anarquista catalán, reaccionó sorprendida y emocionada.

"Siento entre pena, angustia y liberación. La sensación es que se rectifica algo muy mal hecho. Y ya va bien, aunque sea 50 años después y ya no tenga remedio", manifestó Bover en declaraciones a este diario.

Salvador Puig Antich.

Salvador Puig Antich. / REDACCIÓN

"La familia se sentirá muy feliz y liberada porque ha luchado desde entonces para conseguir esta nulidad. Siempre he pensado que se debería pedir perdón por todos los asesinatos del franquismo. Los asesinaron por su ideología, y en el caso de Salvador también por venganza. Acababan de volar a Carrero Blanco y le tocó a él. Si no, no sé qué habría pasado", reflexiona esta mallorquina en una de las contadas veces que se ha pronunciado sobre el anarquista ejecutado en 1974.

Bover da por bueno este final, aunque tardío. E insiste: "Que pidan perdón a todas las familias de los asesinados por el franquismo y que a día de hoy siguen sintiéndose desvalidas".

"No tenemos palabras"

El Gobierno entregó ayer a las hermanas de Puig Antich, ajusticiado con garrote vil tras un proceso lleno de irregularidades, un documento con la declaración de «reconocimiento y reparación» hacia el anarquista catalán.

"Hace 50 años estamos luchando por la dignidad de nuestro hermano Salvador. Estamos emocionados, no tenemos palabras", declaró Inmaculada Puig, una de sus hermanas.

"Salvador Puig Antich fue una víctima, sus familiares también, lo perdieron muy joven. Desde el Ministerio decirles que sé que es un día agridulce, llevaban esperando para esto 50 años, demasiado tiempo, pero es un gesto que saben apreciar porque supone colocar las coas en su sitio", manifestó el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres.

El Gobierno reconoce así "la persecución y violencia padecidas por razones políticas, ideológicas y de conciencia durante la dictadura, y el reconocimiento a su condición de víctima por haber sido condenado a pena de muerte".

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